Según informaron fuentes eclesiásticas, el obispo de 9 de Julio, monseñor Martín de Elizalde -de quien depende jerárquicamente Von Wernich- informó ayer a sus pares, en el intercambio pastoral del primer día, sobre los pasos previstos para sancionar al sacerdote que cumple su condena en el penal de Marcos Paz.

Esta sanción incluiría una prohibición de por vida para ejercer el ministerio sacerdotal; es decir, Von Wernich no podría celebrar más misa o administrar sacramentos dentro de la cárcel.

Un día después de conocida la condena, el pasado 9 de octubre, el obispo de 9 de Julio había informado que "oportunamente" iba a resolver la situación eclesial del ex capellán "conforme a las disposiciones del derecho canónico", aunque en medios eclesiásticos se esperaba que la sanción sea comunicada de inmediato tras la sentencia condenatoria.

Sin embargo, el obispado a cargo de Elizalde esperó los fundamentos del fallo, que fueron leídos por el Tribunal Oral de La Plata la semana pasada, en los que se aseguró que Von Wernich "es un torturador y asesino" que formó parte de un plan criminal durante la dictadura militar, y que para cometer esos actos "utilizó sus hábitos sacerdotales".

Elizalde también había expresado un pedido de perdón "con arrepentimiento sincero" por el accionar del cura condenado, y había lamentado que "haya habido en nuestra Patria tanta división y tanto odio, que como Iglesia no supimos prevenir ni sanar".

El superior de Von Wernich esperó en vano hasta ahora un posible arrepentimiento público del ex capellán de la policía bonaerense y por eso informó ahora al plenario de obispos reunido en Pilar que avanzará en la sanción eclesiástica.