Cristina comentó a los periodistas argentinos que le "pareció poco habitual que en una cumbre un presidente hiciera mención al discurso de otro presidente para mostrar que no está de acuerdo y por eso decidí responderle y pedí la palabra, diciéndole que no era de buen tono su forma de interpelarme".

"Le dije que América latina sí sabía de hostigamientos, que puede dar cátedra de hostigamientos y le reiteré que sí me importaba el euro, porque nuestro Banco Central tiene reservas en euros y que también me interesaba la estabilidad de Francia", agregó la Presidenta.