Viernes, 25 de mayo de 2007 | Hoy
Diabéticos bonaerenses
El Ministerio de Salud de la provincia de Buenos Aires debe proveer, según la ley provincial 11.620, de insulina, material descartable y tiras reactivas para control glucémico a enfermos diabéticos que no posean obra social. En el hospital de San Isidro no se está suministrando ninguno de estos insumos. La explicación que se está dando es que el Ministerio de Salud no está entregando el material y por el momento no hay una solución a este problema. Soy un enfermo diabético insulinodependiente, soy subocupado y no tengo obra social y esto, además de ser un problema, se transforma en una emergencia con riesgo de vida.
Noé Jara
D.N.I. Nº 22.666.513
Espacios públicos
¿Cuál es la función de una plaza? Entiendo que las plazas son un espacio público, un lugar de intercambio para niños, jóvenes, adultos y mayores. Un lugar de descanso y un lugar de posible contacto con la naturaleza. ¿Pero estas actividades son exclusivamente diurnas o también pueden realizarse en la noche? Cuando expuse mis dudas me hablaron de los delitos cometidos en estos espacios, del abuso del alcohol, del vandalismo, de la venta de drogas, de los robos y de la inseguridad entre otras cosas. Si la solución a estos problemas son las rejas, un día viviremos completamente enrejados. ¿Pero de dónde salió esta idea? No es casualidad que esto suceda puesto que muchos de los modos de vivir en la actualidad, tanto en nuestro país como en el resto del mundo, no son más que formaciones de guetos aislados. El máximo exponente de esta realidad son los countries, elegidos para vivir por las clases más poderosas de la ciudad y del país. Estos nuevos barrios generan nuevos bordes y por lo tanto nuevas violencias. El concepto de cerrar algo para cuidarlo es comparable con el de quien deja su auto en un garaje por temor a que se lo roben al utilizarlo. La pérdida de libertad está en crecimiento continuo y se debe hacer algo al respecto. La libertad que se pierde con semejante medida no es nada más ni nada menos que la de circular por nuestros espacios públicos cuando así lo queramos y como queramos. Generalmente, dentro de las obras de recuperación se coloca iluminación en su interior, me pregunto para qué, o más bien, para quién. Si de todas formas esas luces no iluminarán más que los bancos vacíos y la nocturna fotosíntesis de los árboles. ¿Cuál será entonces el refugio de los solitarios y de los amantes? ¿Quiénes son aquellos que no deben estar en las plazas? ¿Los traficantes de drogas, los niños sin hogar? ¿Los jóvenes con sed de violencia? ¿Acaso ellos van a dejar de existir por la colocación de rejas? No, no van a dejar de existir. Van a quedar del lado de afuera, en las calles.
Matías Horacio Torres
D.N.I. Nº 30.978.442
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