Juan Martín Del Potro y David Nalbandian arrancaron con tranquilidad en el Abierto de Australia y ya se instalaron en la segunda ronda, gracias a las victorias que obtuvieron ayer en Melbourne. El tandilense, que estrenó la sexta posición en el ranking mundial, superó al alemán Misha Zverev, mientras que el cordobés le ganó al francés Marc Gicquel. Además, también avanzó Brian Dabul, que se impuso al alemán Philipp Petzschner. En cambio, Agustín Calleri se despidió rápido y su futuro en el circuito internacional es cada vez más incierto.

El título en Auckland significó mucho para Del Potro. Es que además de ser el quinto torneo de su trayectoria, los dos 250 puntos que obtuvo lo catapultaron al sexto lugar del ranking mundial, la mejor posición de su carrera. Y para celebrarlo, despachó con facilidad a Zverev por 6-3, 6-4, 6-2. Igual, todavía no se considera metido en la elite como para pelear mano a mano con el español Rafael Nadal, el suizo Roger Federer, el serbio Novak Djokovic o el escocés Andy Murray. “No puedo estar todavía ahí, necesito improvisar mucho mi servicio, la volea, e incluso necesito tiempo. Quizás en unos pocos meses pueda estar ahí, voy en una buena dirección”, admitió Del Potro.

Ahora, el argentino se enfrentará en la jornada que arranca esta noche ante el alemán Florian Mayer, que proviene de la clasificación y que llegó a esta instancia gracias a su victoria 6-2, 6-1, 6-2 sobre el argelino Lamine Ouhabad. Y para Del Potro puede tener una connotación especial el encuentro: la única vez que se enfrentaron, Mayer se impuso por un contundente 6-0, 6-1 en Stuttgart 2006, casualmente el primer torneo que ganó el tandilense, dos años más tarde. Pero si se desquita, en la tercera ronda Del Potro no tendrá la chance de tomarse revancha de Feliciano López, su verdugo en la final de la Copa Davis, ya que el español quedó eliminado al perder con el luxemburgués Gilles Müller.

Ya en la mañana argentina fue el turno de Nalbandian, cuyo debut tuvo más trabajo que el esperado. Tras un comienzo sencillo, el cordobés se complicó en el segundo parcial, pero luego retomó el control del partido para imponerse 6-1, 4-6, 6-2, 6-3 a Gicquel. A la irregularidad que mostró, Nalbandian se la atribuyó a la tensión de las cuerdas, que no era la correcta. “Igual, estoy contento de haber ganado porque las primeras rondas de un Grand Slam son siempre complicadas”, remarcó el unquillense.

Nalbandian, que a pesar de haber conquistado el torneo de Sydney se mantiene en undécimo en el ranking, tiene en la segunda ronda un compromiso que no parece difícil, pero no deberá confiarse. Su adversario será el taiwanés Yen-Hsun Lu, que venció al brasileño Thomaz Bellucci por 6-3, 7-5, 6-4. “No conozco mucho a mi próximo rival, pero me dijeron que es muy peligroso”, comentó Nalbandian. Lo cierto es que el taiwanés le ganó en los Juegos Olímpicos de Beijing a Andy Murray.

La otra alegría la dio Dabul, debutante en Australia y flamante 100º del ranking mundial, que superó 6-1, 6-2, 6-4 a Petzschner y ahora se enfrentará en la segunda ronda al checo Tomas Berdych, que viene de ganarle 6-4, 6-4, 6--3 a Robby Ginepri. En la madrugada jugaban Diego Junqueira con Richard Gasquet, Juan Mónaco con Jo Wilfried Tsonga, Eduardo Schwank con Tommy Haas, Guillermo Cañas con Dieter Kindlmann, Martín Vassallo Argüello con Gael Monfils y Gisela Dulko con Anastasiya Yakimova.

Mientras tanto, por el mismo lado del cuadro de Del Potro y Nalbandian, los otros favoritos no tuvieron inconvenientes. Federer se impuso 6-1, 7-6, 7-5 al italiano Andrea Seppi, Djokovic derrotó 6-2, 6-3, 7-5 al italiano Andrea Stoppini y el estadounidense Andy Roddick batió 6-0, 6-2, 6-2 al sueco Bjorn Rehnquist.