Del latín, Habemus (tenemos) contractus (contrato), diría Julio Grondona si fuera versado en la lengua del Imperio Romano. Pero como su imperio es otro, el del fútbol argentino, ahora sí, puede quedarse tranquilo. Sólo le faltaba la rúbrica del Boletín Oficial que acaba de hacer público el convenio entre la Jefatura de Gabinete y la AFA. Ese que se esperaba con ansiedad desde hacía varios días. Bajo el paraguas del denominado “Programa Fútbol para Todos”, que tendrá por objeto “la coordinación y articulación de la transmisión y explotación comercial de la televisación de los torneos de Fútbol Argentino para la República Argentina y el exterior...” se conocieron ayer qué cláusulas firmaron el Gobierno y la asociación.

La AFA le cedió “en forma exclusiva a la Jefatura de Gabinete de ministros los derechos primarios y secundarios, por sí o por terceros, por cualquier sistema o procedimiento audiovisual en distintos formatos, creados o por crearse, de las imágenes y/o sonidos obtenidos en ocasión y desarrollo de cada uno de los encuentros de los torneos de fútbol de primera categoría organizados por la Asociación del Fútbol Argentino, para su transmisión en vivo y en directo y/o diferido, en Capital Federal, el interior y el exterior del país...”.

El Boletín Oficial publicó con fecha del 1° de septiembre la creación del Programa Fútbol para Todos y las ocho páginas del contrato entre las partes. El Gobierno y la AFA consideraron que “ningún convenio asociativo puede subsistir sobre la base del enriquecimiento de uno y el empobrecimiento de otro”. Además, se fijaron como algo imprescindible “fortalecer a los clubes” con alternativas que les permitan mejorar su ingresos.

Como contrapartida, los firmantes (el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, Grondona y el secretario general de la AFA, Rafael Savino), se comprometieron a instalar “un sistema de administración que otorgue transparencia y facilite los controles institucionales”. Ergo, la asociación deberá ajustarse a lo previsto en el artículo 6 de su estatuto, donde se prevén distintas penalidades para los dirigentes y clubes que, por ejemplo, asuman compromisos que “afecten el patrimonio”.

La cesión de derechos de transmisión televisiva “tendrá una duración de diez años contados a partir del 20 de agosto de 2009, venciendo en consecuencia el 19 de agosto de 2019”. La AFA aporta el producto y la Jefatura de Gabinete, a través del Sistema Nacional de Medios Públicos, “su estructura organizacional para transmitir los eventos y comercializar por sí o por terceros los derechos de explotación primarios y secundarios”.

Las partes fijaron un pago de 600 millones de pesos como ingreso mínimo anual garantizado más una cláusula de ajuste prevista en el punto 8 del acuerdo, basada en el Valor Básico de Referencia (VBR), que toma en cuenta a los cableoperadores y su tarifa promedio. En el primer año de vigencia del contrato, el Gobierno –dice el convenio– “adelantará el mínimo anual garantizado, de la siguiente forma: a) pesos cien millones, mediante transferencia en el día al Banco Credicoop, sucursal 218, cuenta corriente 1/6, Asociación del Fútbol Argentino, sirviendo el presente de suficiente recibo; b) pesos quinientos millones en once cuotas iguales, mensuales y consecutivas, con vencimiento cada cuota los 15 de cada mes, operando la primera el 15 de septiembre de 2009”.

La Jefatura de Gabinete fijó que la cantidad de partidos a ser televisados será determinada “a su exclusivo criterio”, también elegirá los tres encuentros de mayor convocatoria por fecha para ser emitidos los domingos y, si la AFA postergara alguno, para reprogramarlo deberá contar con la aprobación de Aníbal Fernández. El contrato, en el que caso de que existiera mora en los pagos, podrá darse por resuelto transcurridos quince días de una intimación por parte de la AFA.

Con el dinero que ya tienen garantizado los clubes, los de Primera se repartirán 430 millones, la B Nacional recibirá 78, la B Metropolitana 35 y el fútbol del interior apenas 12. Hasta las categorías que por estatuto son amateurs, la C y la D, percibirán 3 y 1,8 millones.