El defensor de Colón Ariel Garcé no podrá jugar el domingo ante su ex club, River, debido a que en el partido frente a la Universidad Católica por el ingreso a la fase de grupos de la Copa Libertadores, que se definió a favor de los chilenos en los penales, sufrió un desgarro en el músculo oblicuo del abdomen. El jugador tendrá como mínimo para tres semanas de recuperación, por lo que se perderá también los encuentros de su equipo frente a Chacarita y Banfield. Por otra parte, el delantero Esteban Fuertes no tiene fracturado el dedo gordo del pie derecho y, si el dolor disminuye, podría jugar frente a River.