La derrota en semifinales ante Holanda pegó duro en el ánimo, pero no lo quebró, y según coinciden las voces de sus jugadores, la selección de Uruguay saldrá a disputar el sábado el partido por el tercer lugar del Mundial 2010, contra Alemania, como si fuera una final.

“Hicimos un gran Mundial pero no nos vamos a quedar con eso, queremos el tercer puesto”, afirmó Luis Suárez, ausente en Ciudad del Cabo por purgar una suspensión. El delantero podrá volver en Port Elizabeth para el partido que cerrará la mejor actuación de Uruguay en los últimos 40 años. En México 1970, precisamente, uruguayos y alemanes disputaron el partido por el tercer puesto, el 16 de junio de ese año, en el estadio Azteca. Ganaron los europeos con un tanto de Wolfgang Overath.

Habitualmente el partido entre los perdedores de las semifinales de un Mundial es un choque entre dos equipos en estado de depresión por haberse perdido el acceso a la anhelada final. Pero en este caso, Uruguay advierte que pondrá todo para quedarse en el tercer escalón del podio.

“No es lo mismo ser tercero que cuarto –postula Sebastián Abreu–. Uno tiene amargura por no haber llegado más lejos, pero si hacés una encuesta a todas las asociaciones antes del Mundial, todos hubieran firmado jugar por el tercer puesto. Y cuando uno se pone esta camiseta hermosa con cuatro estrellas, que no todos la tienen, indudablemente que hay que salir a ganar siempre.” El delantero Edinson Cavani señaló: “Dimos todo y por eso estamos donde estamos, y por eso queremos estar terceros”.

“Ya hicimos historia pero nos queremos ir bien arriba”, advirtió el volante de Peñarol Egidio Arévalo Ríos. Su colega en el mediocampo, el ex Argentinos Juniors Alvaro Pereira, agregó: “Nos tenemos que levantar para salir adelante, para dejar la bandera en lo más alto, jugar como si fuera una final, porque la camiseta de Uruguay hay que defenderla siempre”.

“Queda una final por delante, todavía no terminó el partido”, agregó el ahora jugador del Porto.

“No nos vamos a conformar con el cuarto puesto”, advirtió Diego Forlán, el goleador del equipo uruguayo. El delantero del Atlético Madrid, que adjudicó la molestia muscular que lo obligó a dejar la semifinal contra Holanda al cansancio que le produjo jugar 67 partidos en la temporada, tiene en el encuentro del sábado la posibilidad de luchar por el sitial de privilegio entre los artilleros del Mundial, ya que suma apenas un gol menos que el español David Villa y el holandés Wesley Snejider, ambos con cinco. Si las estrellas se siguen alineando y su físico lo permite, es posible que el Forlán goleador todavía aumente su cuenta y la de su equipo, ahora que ya no tiene deudas pendientes.

El defensor central y capitán Diego Lugano, que se perdió el duelo contra Holanda por un esguince de rodilla sufrido ante los ghaneses, dijo confiar en su recuperación para el partido del sábado.