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Las discusiones que lo tuvieron en el centro de la escena durante la semana no distrajeron al entrenador de Banfield, Julio César Falcioni. El equipo del sur afronta esta noche un importante compromiso en el Apertura, ante Arsenal, mientras se prepara para la revancha con los colombianos del Tolima por la Copa Sudamericana. El entrenador desgranó ante Página/12 las claves de su Banfield, protagonista en los dos frentes.

“Este equipo es molesto y complicado, no les da espacio a los rivales y cuando tiene la pelota sabe cómo jugarla. No tenemos un fútbol ideal, pero partido a partido demostramos que hay un equipo que se acerca a ese objetivo”, aseguró.

El elenco está dentro del pelotón de equipos que siguen de cerca a Estudiantes, pero el horizonte internacional también se mantiene abierto. Entonces Falcioni debe afrontar dos certámenes con un plantel reducido en nombres.

“Todavía no llegó el momento de decidirse por un torneo, a pesar de no tener un caudal importante de jugadores. La Sudamericana es un campeonato que prestigia a un club como Banfield, que está consolidándose fuera de la Argentina”, remarcó. Pero el técnico sabe que no se puede dejar de lado el Apertura porque “hay que sumar para seguir en el lote de los de arriba”.

Conductor de un conjunto ordenado, consciente de sus cualidades y limitaciones, el ex arquero analizó los fundamentos del éxito en las últimas temporadas, entre las que se destaca la vuelta olímpica en el segundo semestre de 2009.

“Este es un plantel combativo, bien equilibrado, que sabe lo que quiere y que quizá no se brinda por el espectáculo; pero el fútbol no es espectáculo. Jugar bien no siempre es simplemente tocar. Jugar bien es ser completo en todas las facetas, desde la defensa hasta el ataque.” Falcioni sostiene la necesidad de tener un equipo solidario para conseguir resultados positivos. “Banfield sabe manejar los tiempos con inteligencia y supera al rival anímicamente desde el primer minuto. Esa es una virtud que muy pocos equipos tienen, y salir desde el vestuario con esa mentalidad es algo fundamental en busca de pelear cualquier campeonato”, enfatizó.

Para que esa premisa tenga conclusión viable son pilares fundamentales las individualidades de este plantel. Referente indiscutido, Walter Erviti es el generador de juego por excelencia de un equipo que lastima en los momentos justos. Y así lo pone en consideración el propio técnico.

“Tenemos jugadores de jerarquía que pueden hilvanar proyecciones con una gran velocidad, pero además es importante improvisar. En esa faceta es prioridad lo que puede hacer Erviti”, apuntó.

Cuestionado por la utilización de la pelota parada, un arma que bien sabe aprovechar su equipo, Falcioni reaccionó: “Los resultados no se consiguen simplemente con pelotazos, sino que es clave tener precisión con el balón”. Algo que el 10 de Banfield muestra a raudales.

“Nuestra principal arma no es la pelota parada, sino la solidaridad que tienen todos los jugadores para presionar cuando es necesario y jugar con buen toque cuando es preciso. Este es un plantel muy completo, aunque sea algo limitado en nombres. Jugar dos certámenes se hace cuesta arriba, pero tenemos chances de llegar mucho más lejos”, consideró.

Producción: Matías Quercia.