Argentina buscará cerrar de la mejor manera la primera rueda de las Eliminatorias Sudamericanas cuando esta noche reciba a Uruguay en el estadio Malvinas Argentinas de Mendoza. Con este enfrentamiento, el equipo de Alejandro Sabella completará los cruces ante todos sus rivales y, en caso de ganar, quedará en el primer lugar en la mitad del camino en la clasificación para Brasil 2014. El conjunto uruguayo es un rival de muchísimo cuidado, aunque su nivel viene en franco descenso, con apenas cinco puntos en los últimos cuatro partidos, tres de ellos como local en el estadio Centenario.

Con la confirmación oficial de parte del entrenador del tridente ofensivo que conforman Lionel Messi, Sergio Agüero y Gonzalo Higuaín, más el aporte de Angel Di María, casi un cuarto delantero, Argentina buscará una actuación que sirva para consolidar esa idea. Sabella dejó en claro que los rendimientos de sus atacantes casi que lo obligan a colocarlos como titulares, aunque también indicó que para ello necesita conformar una estructura que los pueda contener. En ese dilema se encuentra el técnico, que le quiere dar “equilibrio” a su equipo, sin perder el poder explosivo que le dan los cuatro de arriba. Para ello, la apuesta sigue siendo por Fernando Gago y Javier Mascherano como volantes de contención, Federico Fernández y Ezequiel Garay como zagueros centrales y Pablo Zabaleta y Marcos Rojo como marcadores de punta.

Hasta el momento, el equipo argentino tuvo un rendimiento aceptable como local, salvo en el pobrísimo empate 1-1 ante Bolivia. Sin ese partido, el porcentaje de efectividad fue perfecto, con los triunfos cómodos 4-1 ante Chile, 4-0 ante Ecuador y 3-1 ante Paraguay. Ese colchón de puntos logrados en casa le permitió ser líder del grupo hasta el momento con 14 unidades, aunque hay un lote de cinco equipos que siguen de cerca: Colombia y Ecuador suman 13 puntos, Uruguay y Chile tienen 12 y Venezuela cierra ese grupo con 11. Por eso, una eventual victoria del equipo de Sabella le permitiría, más allá de los otros resultados, despegarse del conjunto uruguayo y de Venezuela, que tiene fecha libre en esta jornada.

Para buscar mantener la punta, la apuesta es superar a un equipo uruguayo que trae como antecedentes el cuarto puesto en el Mundial y el título de la Copa América, aunque sus últimas actuaciones provocaron algunas dudas sobre su rendimiento. La goleada 4-0 en su visita a Colombia y un polémico empate 1-1 ante Ecuador en el Centenario, con un grosero penal no cobrado para los visitantes cuando se imponían 1-0 en la segunda mitad, despertaron la señal de alarma en el equipo de Oscar Tabárez. Igualmente, con el tridente ofensivo de Luis Suárez, Edinson Cavani y Diego Forlán sigue siendo un rival complicado, aunque deberá superar la baja de Diego Pérez, una pieza fundamental en la mitad de la cancha. “El equipo uruguayo es un equipo muy unido, con una mentalidad fuerte. Tienen buenos jugadores, potentes y con gran capacidad física”, fue el elogio de Sabella, que fue ayudante de la selección uruguaya cuando Daniel Passarella era el entrenador.

En otro orden, ayer se confirmó que la revancha del Superclásico de las Américas ante Brasil, que se suspendió por un corte de luz en Chaco, se reprogramó para el 21 de noviembre en la Bombonera.