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En su regreso al Mundial de MotoGP, este año, el Grand Prix de la República Argentina atrajo una de las convocatorias más nutridas de todo el torneo, con cerca de 126 mil espectadores en Termas de Río Hondo, y esa popularidad justificó una nueva edición. Javier Alonso, director de eventos de Dorna, la empresa que organiza el mundial, destacó en una charla con este diario el nivel de fanatismo de los argentinos por las motos en la presentación de la carrera, a disputarse el próximo 19 de abril.

–¿Se puede hacer un Grand Prix de motos en la Argentina sin un piloto local? ¿Es sustentable?

–¡Se puede! Ahora nos parece fundamental que hubiera un argentino, pero hay que ir con cuidado.

–¿Podría ser Leandro “Tati” Mercado, que ganó la Copa FIM SuperStock 1000 e irá el año que viene al Mundial de Superbikes?

–Tati anda muy bien, pero él corre con máquinas de serie y sentarlo en una MotoGP con 270 HP con neumáticos que no tienen nada que ver con los que él está acostumbrado, probablemente sea un salto muy grande. Si él puede conseguir una moto apropiada y prepararse con tiempo, podría ser, porque si no salir a pista y quedar último no le servirá a su carrera.

–Que el hincha local sea tan apasionado, ¿facilita la concreción de una carrera aquí? Hubo pilotos a los que tanta pasión pareció fastidiarlos este año.

–Bueno, tendremos que hacer algo para que en el autódromo no les tome media hora llegar desde sus oficinas al box. El hincha argentino es muy apasionado, es posible que sean los más apasionados en el calendario. Este es un país con muchísimos aficionados, tiene mucho interés. Con Sebas (Porto) perdimos una oportunidad para aprovechar su enorme experiencia y capacidad, a modo de que lo suyo sirviera para impulsar a otros pilotos que venían detrás de él.

–¿Con qué imagen se fueron del autódromo de Termas de Río Hondo?

–En cuanto al circuito, es uno de los más seguros del mundo, sin dudas; los pilotos también lo ven así, no hubo críticas en cuanto al trazado, en el que se puede correr muy rápido –de hecho, el más rápido del calendario después de Phillip Island, en Australia– sin tomar grandes riesgos. Hubo problemas de infraestructura, seguro, pero estuvo muy bien para ser el primer año y estoy convencido de que todo se va a solucionar para 2015.

–¿Le interesaría traer el Grand Prix a Buenos Aires?

–No. Nos sentimos muy orgullosos de colaborar en el desarrollo de zonas deprimidas. Termas nos parece el gran lugar. El contrato con la Argentina y la muy buena relación con su gobierno nos lleva a imaginarnos que podamos seguir realizando acá la fecha del Mundial de Motos.