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“Sinceramente, estoy viviendo el mejor momento de mi vida deportiva. Después de las lesiones, de estar casi quince meses sin jugar, volver a ganar un torneo significa una alegría enorme.” Guillermo Cañas no ganó un torneo sino dos: en las dos últimas semanas conquistó los certámenes de Stuttgart y Umag, que lo devolvieron a lo alto del ranking después de haberse caído de los primeros cien del tenis mundial, y ayer mostró su alegría en Buenos Aires.
“Yo sentía que estaba jugando bien pero no se me daban los resultados. En Roland Garros me ganó Gaudio en cinco sets y después fue el campeón. Después vino Den Bosch y perdí 7-6 en el tercero. Luego, en Wimbledon, me vencieron 9-7 en el quinto parcial”, explicó. “Sólo quedaba seguir trabajando duro, porque los resultados en algún momento iban a llegar y por suerte se dio por partida doble”, enfatizó.
“Hacía casi dos años que no ganaba un torneo y eso te da vueltas en la cabeza, a pesar de que había estado alejado del circuito por las lesiones que tuve”, indicó Cañas, quien lleva ganados cinco torneos en el circuito, ya que con anterioridad había conquistado los títulos de Casablanca, en el 2001, y Chennai y Toronto, ambos en 2002.
Cañas arrancó el año en el puesto 248º del ranking y sus mejores actuaciones, antes de los títulos de Stuttgart, cuando venció en la final a Gaudio, y Umag, donde derrotó a Filippo Volandri, habían sido la victoria en el challenger de Nueva Caledonia, en Oceanía, y las semifinales de Acapulco.
“Cuando uno está lesionado no ve la hora de volver a jugar y por eso ahora, que logro ganar torneos, quiero disfrutar de este momento por todo lo malo que me tocó vivir”, precisó el tenista argentino, quien llegó a ser el número 12 del mundo en 2002 y que ahora, tras ambas conquistas, se ubica 31º en el escalafón.
“Si a principios de año me hubieran dicho que en julio iba a estar en ese puesto, no lo habría creído –dijo–. Por eso no tengo que guiarme por el ranking sino por seguir mejorando. Sin lugar a dudas que tengo ganas de volver a meterme entre los mejores del mundo. Entreno y trabajo todos los días para eso. Será mi gran objetivo para 2005”, precisó.
Consultado por la carta que los principales tenistas argentinos le enviaron en abril a la Asociación Argentina de Tenis para que destituyera a Gustavo Luza, proponiendo a Alberto Mancini como reemplazante, Cañas dijo que no estuvo de acuerdo “en la forma”, pero que sirvió para que se conociera “la opinión de los jugadores. Ahora que pasaron unos meses se puede decir que la forma no estuvo bien, pero que también eso sirvió para que la AAT nos escuchara”. El tenista jugó el último partido en Bielorrusia.