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Juan Chela y Agustín Calleri, los dos argentinos que jugaron y ganaron ayer en el Masters Series de Madrid, reclamaron que la Argentina tenística se comporte “como la potencia que es” y que asuma su responsabilidad en la sucesión de casos de doping. “Tenemos que actuar como la potencia que somos”, dijo Calleri en Madrid. “Hay que copiar a las mejores federaciones”, coincidió Chela. Calleri derrotó 6-0, 7-5 a Albert Costa y Chela se impuso 6-2, 6-3 al chileno Nicolás Massú. Hoy jugarán Calleri, David Nalbandian y José Acasuso.
El tenis argentino acumula seis casos de doping en su historial y el diario L’Equipe denunció un presunto séptimo caso al asegurar que Mariano Puerta dio positivo en Roland Garros. Calleri no cree en la “persecución de argentinos” con que especularon algunos compatriotas y prefiere apostar por la autocrítica: “Los argentinos somos bastante informales en todo”.
“Francia y España tienen bien montada su estructura, y si somos potencia, la Asociación Argentina de Tenis (AAT) debería hacer algo acorde, armar por ejemplo un centro especializado en doping en el Cenard (Centro de Alto Rendimiento Deportivo)”, propuso. “(El presidente de la AAT, Enrique) Morea sabe cómo funcionan estas cosas, cómo trabajan la federación francesa, la inglesa, la estadounidense... El lo sabe, y deberíamos copiar a los demás”, agregó.
Chela puso el acento en la anarquía médica que existe entre los tenistas argentinos. “Nosotros no tenemos un Ruiz Cotorro”, dijo, recordando a Angel Ruiz Cotorro, el jefe médico de la Federación Española de Tenis (RFET) que controla a todos los jugadores de primera línea del tenis español. “Falta eso”, dijo resignado Chela, que aventuró una teoría: “Como el tenis es un deporte tan individual, cada uno va a lo suyo”.
Ambos coincidieron en que la AAT no contactó con ellos tras conocerse los casos y denuncias de doping de los últimos meses. “Nada. Lo único que hay son peleas por la Davis y esas cosas. No están armando nada bueno para nosotros”, se lamentó Chela, protagonista en el 2001 de uno de los casos argentinos. “Cada caso es diferente. Pero la informalidad y el confiar en la gente, como me pasó a mí, tienen mucho que ver”, explicó.
Tanto Calleri como Chela defendieron a Puerta. “Lo de Mariano no es oficial, y por eso no tengo nada que decir”, dijo Chela con gesto serio. “Yo veo muy bien a Mariano, lo que se escribió de él lo publicó un diario y los diarios muchas veces se equivocan. Anoche (por el domingo) vi River–Boca con él y está de lo más tranquilo”, describió Calleri.“A mí a veces me preguntan qué pasa con los argentinos. Y yo les digo que nada. Escuché a Ljubicic quejarse de oportunidades perdidas por caer ante Puerta en Roland Garros. Como si él fuera a llegar a la final en un torneo sobre polvo como ése...”