Cuando a los trece minutos del segundo tiempo del partido ante Estudiantes Luciano Figueroa cayó desplomado tomándose la rodilla izquierda y exhibiendo claras muestras de dolor, la sensación generalizada era que el goleador había sufrido una lesión grave. Mucho más cuando el médico Luis Seveso pidió el cambio de inmediato y al delantero se lo llevaron en camilla. Y ayer, tras someterlo a estudios más complejos, se comprobó lo que se suponía, y el diagnóstico inicial de “esguince de rodilla” se transformó en una “lesión importante en el ligamento cruzado anterior”. Por eso, el delantero rosarino será operado la semana próxima y lo espera una inactividad de entre seis y ocho meses. Y así se le acabó el sueño de llegar al Mundial y disputar la Copa Libertadores.

A media tarde, Figueroa llegó junto a su padre y al dirigente Rodolfo Cuiña a una clínica porteña, donde le realizaron una resonancia magnética para comprobar la gravedad de la lesión. Sin embargo, aún antes de los estudios, Seveso ya había adelantado que el jugador tenía afectados los ligamentos, aunque prefirió no hablar de rotura hasta no someterlo a la operación. “Ya está, hay que ponerle el pecho a la situación y mirar para adelante. Pasé por cosas peores en la vida y sé que me voy a recuperar”, indicó Figueroa, que descartó que la lesión se le haya producido por el mal estado de la cancha tras los recitales de los Rolling Stones y U2.

“La lesión es importante pero en este momento no podemos decir que sea una ruptura, porque eso se determinará en el momento de la intervención”, destacó Seveso, que adelantó que el futbolista será operado la semana próxima. El médico informó también que las lesiones de ligamentos cruzados “tienen un plazo mínimo de recuperación de seis meses”, pero que se puede extender a partir de las partes afectadas, algo que recién podrá determinarse en el momento de la operación.

La lesión del delantero llegó justo cuando estaba atravesando un gran momento futbolístico, por lo que había recuperado la ilusión de integrar la lista definitiva para el Mundial de Alemania. Sin embargo, Figueroa ya se había descartado antes de conocerse los resultados. “Por lo que pinta, me siento muy lejos del Mundial. Vine a River para estar más cerca del seleccionado y tener una chance, pero esto me aleja definitivamente de esa posibilidad”, indicó el goleador, que había marcado dos tantos ante Colón.

Conocida la confirmación de la lesión, sus compañeros expresaron su lamento. “La lesión nos cayó como una bomba y nos empañó la alegría del resultado. Es una desgracia. Yo lo sufrí y sé bien de qué se trata”, señaló el lateral Federico Domínguez. “Es muy duro, pero hay que salir adelante”, señaló Daniel Montenegro. “Ahora habrá que reemplazarlo lo mejor posible, porque no queda otra”, comentó el delantero.