A las 15 de ayer partía el vuelo que, desde Córdoba, traería de regreso al plantel de River a Buenos Aires. Pero a esa hora, a diferencia de lo que había sucedido por la mañana, el clima, que incluyó una intensa granizada, impidió la salida de los vuelos programados. Como si el plantel riverplatense no tuviera temas de los que ocuparse a menos de una semana del partido más trascendental en lo que les queda del año, el superclásico contra Boca, el domingo, las complicaciones meteorológicas lo obligaron a cambiar inevitablemente el retorno: el micro que finalmente los traía de la capital cordobesa arribaba al Monumental esta madrugada. El traslado carretero no resultó del agrado de ninguno de los integrantes del equipo, pero Marcelo Gallardo y Ariel Ortega, especialmente, lo hicieron saber en voz alta ante el entrenador Daniel Passarella.

Según se supo, la charla entre el entrenador y los jugadores al término del partido contra Belgrano había sido de fuerte tono, con reproches incluidos. La decisión, casi inevitable, de tener que cambiar el avión por el ómnibus les habría dado la chance a los jugadores de poder seguir discutiendo con el técnico. El plantel se había movido de manera liviana durante la mañana, en el hotel y bajo techo, y la complicación presume hacerles perder al menos medio día más de entrenamiento con miras al partido del domingo en el Monumental.

Passarella necesita las prácticas para delinear el mejor equipo posible con el que enfrentarse a Boca. La idea original era juntar en el terreno a los jugadores que se han dado en llamar “los 5 Fantásticos”: Gallardo, Ortega, Belluschi, Higuaín y Falcao. Sin embargo, al DT algunos rendimientos no lo dejaron satisfecho el domingo (por eso los reproches) y por esa razón necesita los entrenamientos para ajustar detalles: si esos cinco son titulares, le falta definir quién será el volante central (Domingo o Sosa) si es que decide parar una defensa en línea de cuatro, como se especula, para no sufrir sorpresas como contra Colón o Belgrano, cuando llovieron empates en los últimos minutos.