Gonzalo Higuaín fue convocado por el entrenador Raymond Domenech a jugar para la selección de Francia contra Grecia, pero rechazaría el llamado: el jugador de River se negó a revelar su decisión y prometió develarla el lunes, cuando deba sumarse al plantel galo.

“La situación es difícil, tengo que hablarlo bien con la familia”, dijo el delantero de 18 años, quien agregó que se sentía “orgulloso” por figurar en la lista de 24 futbolistas convocados para el choque ante el campeón europeo, Grecia, el miércoles en el Stade de France de París. “Todavía no sé si voy. Me pone contento que al menos me hayan convocado, aunque el lunes hablo”, dijo el jugador.

Higuaín es francés de nacimiento (nació el 10 de diciembre de 1987 en Brest) y nunca cambió su nacionalidad: posee pasaporte comunitario y quiere retenerlo para facilitar una transferencia al exterior. Ayer se sumó el Real Madrid como candidato a comprar su pase en 12 millones de euros. Sin embargo, si Higuaín rechaza jugar para la selección francesa, porque mantiene la ilusión de hacerlo con la camiseta albiceleste, necesitará adoptar la nacionalidad argentina, para lo cual deberá renunciar a la francesa, lo que podría complicar su transferencia al fútbol europeo.

Sus padres nunca lo anotaron en el consulado argentino de París y cuando volvió, con 10 meses, tampoco hicieron el trámite en el registro civil argentino. “La culpa es mía, todo se debe a mi ignorancia –explicó en su momento Jorge Higuaín, ex jugador de River y Boca, y futbolista del Brest en 1987–. Cuando nació Gonzalo, si yo iba a París y lo anotaba en la embajada argentina, todo este lío no se hubiera armado.”