Luego de la histórica participación en el Mundial de Rugby de Francia, la Selección Argentina comenzó a pasar las facturas correspondientes. Ayer se reunieron para hablar no sólo del tercer puesto logrado en la Copa del Mundo, sino que aprovecharon para criticar a los dirigentes y evaluaron las chances de poder jugar los mejores torneos ante las principales potencias mundiales.

El capitán, Agustín Pichot, reiteró que “se terminó un gran ciclo” en su vida deportiva y consideró que a partir de la medalla de bronce obtenida “la dirigencia tiene que trabajar para el mismo lado que los jugadores”.

“Fueron años muy lindos los que pasé con este grupo”, comenzó diciendo Pichot en la conferencia de prensa que compartió ayer con el entrenador Marcelo Loffreda, los jugadores Gonzalo Longo, Mario Ledesma y Juan Martín Hernández y el manager del equipo José Luis Rolandi.

Sobre si el partido con Francia fue el último suyo con la camiseta argentina, contestó: “Me gustaría vestir la camiseta de Los Pumas en mi país por un montón de cosas personales”.

Rápidamente llegó la consulta sobre el futuro del rugby argentino a nivel mundial. Allí, el capitán se puso serio. Parecía estar esperando la pregunta y comenzó su respuesta en la que se refirió puntualmente al vínculo con los dirigentes.

“Después de todo lo que ha hecho este equipo en la cancha, queda la mesa de negociaciones, las propuestas o los planes. Vale más la discusión política que cualquier otra cosa. Igualmente no creo que Argentina juegue el Tres Naciones –ante Australia, Nueva Zelanda y Sudáfrica– ni el Seis Naciones –frente a Inglaterra, Francia, Gales, Escocia, Irlanda e Italia–”, aseveró. Y fue a fondo: “Lo importante fue que, con lo mínimo, se consiguió una medalla de bronce. De ahora en más la dirigencia debe trabajar junto con nosotros, ya que en el rugby internacional todos van para el mismo lado: jugadores y dirigentes. Nosotros estamos para jugar y no para elegir entrenadores”, destacó.

Sobre el mismo tema, Ledesma añadió que “sería bueno que los dirigentes se pusieran a trabajar juntos y que se planifique el futuro. Deben preparar los partidos y la temporada en las mejores condiciones. No es bueno que nos pongan palos en la rueda, como hizo la dirigencia el año pasado. No necesitamos estar enfrentados con ellos, para estar fuertes”, precisó el forward de Los Pumas.

Luego tomó la palabra el entrenador Marcelo Loffreda, quien prefirió eludir el asunto al mencionar que “todo lo que tenía que demostrar el equipo ya lo hizo en la cancha” y que sólo restan “reuniones políticas”. En cuanto a lo deportivo, resaltó “el compromiso y el esfuerzo” del plantel y advirtió que “esta unión debe seguir fuerte y sólida en el tiempo, más allá de los hombres que entren o que se vayan”.

“Este grupo se merecía lo que consiguió y mucho más. El tercer puesto es algo increíble. El proceso se inició antes y durante el mundial de 2003 y prosiguió en 2004, cuando comenzamos a pergeñar toda la preparación para Francia 2007”, recordó Loffreda, quien ya no dirigirá más el seleccionado.

Casi sobre el cierre de la conferencia, el manager del equipo, José Luis Rolandi, retomó el tema de la relación con los dirigentes y dejó una reflexión: “El seleccionado no tenía canchas para realizar los entrenamientos. Por eso aprovecho esta oportunidad para agradecerles a los dirigentes de Newman y Belgrano que nos facilitaron las canchas para entrenar. Si queremos mejorar, el futuro debe ser diferente”.