Para su temporada debut en la Fórmula 1, Lewis Hamilton firmó un contrato por 400 mil dólares más 10 mil dólares por cada punto que obtuviera en la pista. Como sumó al final 107 puntos, perdiendo por apenas tres el título mundial a manos del finés Kimi Raikkonen, cobró al final del año cerca de 1,5 millón de dólares. Con los premios, sumó cerca de 4 millones. Raikkonen, en cambio, había firmado para Ferrari por 40 millones. A comienzos de 2008, McLaren le ofreció un nuevo contrato al británico, esta vez de 20 millones de dólares por año hasta 2012 inclusive, para evitar que otro equipo le robara al piloto. Pese al aumento, Hamilton será sólo el tercer piloto de F-1 mejor pago, tras Alonso y Raikkonen.