Viernes, 7 de marzo de 2008 | Hoy
ECONOMíA › LOS VEEDORES AVALARON AL GRUPO WERTHEIN Y RECRUDECIO LA INTERNA
Por Fernando Krakowiak
Página/12 reveló ayer en exclusiva que el informe de los veedores designados por el Gobierno en Telecom avaló la posición del Grupo Werthein, quien sostiene que el desembarco de Telefónica en Telecom Italia, accionista mayoritario de la firma, provocará un monopolio en el mercado local de telecomunicaciones. La difusión del dato generó malestar en el Gobierno, donde se estaban esforzando para mantener en reserva las conclusiones. También hubo revuelo en la empresa. Los directivos que reportan a Italia acusan a sus socios locales de filtrar la novedad. Mientras que del lado de los Werthein sostienen que la información pudo haber salido de los “italianos”, ya que ese frente se ha venido resquebrajando desde que se supo que no habrá lugar para todos dentro de la compañía. La noticia también generó nerviosismo en Telefónica, donde temen que el Gobierno ponga en riesgo la operación. Una reacción justificada si se toma en cuenta que lo que está en juego es el control de un mercado que factura más de 20.000 millones de pesos por año.
El informe de los veedores refleja cuatro meses de trabajo dentro de la empresa, durante los cuales participaron de las reuniones de directorio y del consejo de dirección para tratar de establecer el impacto que generó a nivel local el ingreso de Telefónica en Telecom Italia. La tarea incluyó también la realización de entrevistas con directores y gerentes y el acceso a documentación de la compañía. Esta “intervención” había sido solicitada por el Grupo Werthein, quien desde mediados del año pasado venía denunciado que Telefónica había comenzado a tallar en las decisiones de su principal rival, desmintiendo al accionista mayoritario. El pedido tuvo sus frutos, pues los dos veedores oficiales avalaron esa posición.
Ayer dentro de Telecom se vivió una jornada de tensión. Fuentes de la compañía señalaron que uno de los más incómodos por la noticia que difundió este diario fue Mariano Cornejo, director de Comunicaciones y Medios desde julio del año pasado. Cornejo llegó a ese puesto de la mano de los hermanos Werthein, luego de trabajar doce años como director de Marketing de la Caja de Ahorro y Seguro, empresa perteneciente al grupo W. Por lo tanto, los “italianos” desconfían. Algunos creen que el resultado del informe de los veedores y los nombres de los directivos que están en la cuerda floja se pudo haber filtrado a través de él. Aunque también sospechan del Gobierno.
Los Werthein, por su parte, rechazan la acusación y dejan entrever que el dato podía haber sido acercado a este diario por algún directivo puesto por Telecom Italia que ahora se siente “despechado”. Entre los “despechados” se ubica a los que ingresaron cuando Pirelli era accionista, los cuales se quedaron sin respaldo y ahora podrían hacer cualquier cosa para evitar ser removidos. En ese grupo se encuentran Guillermo Gully, director general corporativo; José Peña Fernández, director de Abastecimiento; y Eduardo Varela, gerente de Real Estate.
Las acusaciones cruzadas son una muestra del brutal enfrentamiento que se vive dentro de la compañía. El vicepresidente Gerardo Werthein afirma cada vez que tiene oportunidad que desde que Telefónica ingresó en Telecom Italia, el modo de tomar las decisiones en la filial local cambió y que los “italianos” imponen en el directorio el voto doble que les corresponde por ocupar la presidencia para no tener que consensuar nada.
El presidente, Carlos Felices, y los otros dos directores que representan a los italianos, Enrique Garrido y Oscar Cristianci, sostienen, en cambio, que Werthein viene victimizándose desde fines del año pasado para romper la opción de compra a un valor fijo que tiene Telecom Italia sobre el 30 por ciento de sus acciones. Ellos tampoco creen que el Gobierno haya intervenido en la pelea para defender los intereses de los usuarios y el sentido de la competencia que debe privar en el mercado. En verdad sospechan que presiona porque se quiere quedar con una parte de la compañía de manera directa o a través de algún tercero que tenga para ofrecer algo mejor que el tándem Telefónica-Telecom. Esa lectura les hace creer que el informe de los veedores es un paso más dentro de esa escalada y, por lo tanto, no descartan que la filtración del resultado forme parte de la estrategia oficial.
El trabajo de los observadores oficiales no es vinculante, pero el Gobierno se podría basar en sus conclusiones para exigirle a Telecom Italia que se desprenda de Telecom Argentina o forzarla a realizar algún tipo de desinversión. El argumento que avala esta posición es el de aquellos especialistas del sector que afirman que la influencia de Telefónica en Telecom Italia no debe medirse por la cantidad de acciones, sino por el control que ejerce. Para fundamentarlo, sostienen que Pirelli, la empresa que le vendió las acciones a Telefónica, no era un accionista más, sino quien controlaba la firma. Por lo tanto, si Telefónica reemplaza a Pirelli, quien pasa a ejercer ese control es Telefónica. Los italianos rechazan el argumento y sostienen que ni siquiera es necesario notificarle la operación a la Comisión de Defensa de la Competencia. Se basan en un informe elaborado por el prestigioso abogado Juan Carlos Cassagne, quien curiosamente fue director de Telefónica en el pasado.
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.