El delantero de Boca Martín Palermo afirmó ayer que “siempre” quiere jugar, aunque reconoció el gasto que hizo su equipo para lograr la clasificación a los cuartos de final de la Copa Libertadores. “Uno siempre quiere jugar, pero somos conscientes del desgaste que sufrimos en el partido ante Vélez. Si hay alguna posibilidad de darle descanso a algún jugador, se verá, más que nada para no sufrir después”, remarcó el goleador, quien se cuidó de no menospreciar el partido del domingo ante Arsenal por la decimocuarta fecha del torneo Clausura. “Vamos a evaluar cómo estamos físicamente, porque sabemos que el partido del domingo es importante, como también lo será el de la semana que viene por la Copa, cuando tendremos que hacer una diferencia importante de local como con Vélez”, remarcó el delantero, quien de esa forma dio los primeros indicios de lo que podrá suceder frente a los de Sarandí: Russo comenzará la rotación de jugadores, debido a que el conjunto titular empieza a dar muestras de cansancio por la disputa simultánea del campeonato local y la Copa Libertadores. “El haber dejado afuera a un rival difícil como Vélez nos alegra. Hicieron un buen planteo, pero en definitiva los que seguimos en la Copa somos nosotros”, se ufanó el goleador, que ayer volvió a entrenarse en Casa Amarilla y junto a los demás que actuaron en Liniers realizó sólo trabajos regenerativos, mientras que los que no jugaron hicieron trabajos con pelota en espacios reducidos.