No hay día en el que no se agreguen nuevos elementos al diagnóstico de la crisis mundial. Pero pocas veces como ayer coincidieron tantas referencias a la vez sobre la profundidad del colapso. Tres de las mayores economías asiáticas –Japón, Corea del Sur y China– anunciaron cifras negativas acerca de la evolución de su PIB, ya sea por su caída o por de-saceleración. Grandes y emblemáticas empresas anuncian fuertes pérdidas y recortes de personal. Microsoft eliminaría 1400 puestos de trabajo en lo inmediato y elevaría la cifra a 5000 en el próximo año y medio. La avalancha de malas noticias arrasó con las expectativas en los principales mercados bursátiles, reflejando bajas en la Bolsa de Nueva York (1,28 por ciento el Dow Jones y 2,76 el Nasdaq) y en las principales plazas europeas (París, 1,24 por ciento; Francfort, 0,98; Londres, 0,19 y Madrid, 0,87). En Buenos Aires, tal como ocurrió en toda la región latinoamericana, las cotizaciones accionarias también retrocedieron (Merval, 0,45 por ciento; San Pablo, 1,68), en tanto el dólar subió otro centavo, a 3,49 pesos.

Por un buen tiempo, el flamante presidente Barack Obama deberá acostumbrarse no sólo a convivir con datos negativos sino incluso a recibir malas noticias casi a diario. Ayer, fue informado de que en la última semana se han sumado 589 mil nuevas personas a la larga nómina de desempleados en su país, marcando un record histórico. Además, el gigante informático Microsoft acaba de anunciar la supresión de cinco mil empleos en los próximos 18 meses, tras dar a conocer las cifras de resultados de su último balance trimestral.

Desde Oriente también llegan advertencias preocupantes. Proyecciones oficiales sobre la evolución del Producto Bruto para el año fiscal en curso (abril 2008 a marzo 2009) en Japón, dadas a conocer por el banco nacional de ese país, señalan que la economía nipona se contraerá 1,8 por ciento a su cierre. Una revisión total al pronóstico previo de la misma fuente, que señalaba un crecimiento del 0,1 por ciento. En cuanto a China, pese a que permanece en un terreno envidiable para el resto, habría verificado una fuerte desaceleración al cierre del año 2008, con un crecimiento del 9 por ciento sobre el período anterior, contra un 13 por ciento en 2007. Este descenso estaría marcado fundamentalmente por el freno evidenciado en los últimos meses del año, en los cuales se calcula que la tasa interanual de crecimiento habría bajado al 6,8 por ciento.

En tanto, el Producto Interno de Corea del Sur ya evidencia que la crisis internacional golpeó de lleno en su economía, reflejado en una caída del 5,6 por ciento en el cuarto trimestre de 2008 respecto del trimestre precedente. Estadísticamente, es su mayor disminución en más de diez años. En lo que respecta a las economías europeas, el Fondo Monetario Internacional hizo pública una proyección revisada sobre la evolución del Producto Bruto en Alemania para el año 2009, previendo una caída del 2,5 por ciento.

El grupo electrónico japonés Sony admitió que podría sufrir una pérdida neta de 1658 millones de dólares al final del ejercicio 2008/09. El finlandés Nokia, líder mundial en telefonía móvil, informó que por caída en las ventas y en los precios, sus beneficios netos del cuarto trimestre de 2008 se vieron reducidos en un 60 por ciento. Otro signo dramático de la vastedad alcanzada por la crisis mundial es el dato, también difundido ayer, de una disminución en la producción mundial de acero del 25 por ciento en diciembre pasado respecto del mismo mes del año anterior. Tomando el conjunto de lo producido en el año, 2008 fue inferior a 2007 en 1,2 por ciento.

Voceros de Microsoft adjudicaron a la caída en el consumo de productos informáticos la causa del descenso en sus resultados. El recorte de personal en la empresa líder en software es un eslabón más en la cadena de impactos denunciados por otras líderes del sector. Intel anunció esta misma semana el cierre de sus plantas en Malasia y Filipinas y que parará la producción en las fábricas estadounidenses de Hillsboro, Oregon y Santa Clara, en California. Los recortes podrían afectar a entre cinco y seis mil personas.