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La distribuidora eléctrica Edenor reinició el proceso de impresión y distribución de facturas, que ahora tendrán los valores previos a los aumentos decretados por el Gobierno. Las nuevas facturas incluyen la bonificación del diferencial que se generó tras el pago del importe con aumento. También vienen con una leyenda que reza en rojo “cliente subsidiado” y, en un volante aparte, aparece una comparación de la tarifa eléctrica que se paga en otras provincias y países limítrofes. Desde Edesur la distribución de facturas se demorará entre 10 y 15 días, pero sí adelantaron, al igual que Edenor, una nota de pago para aquellos usuarios que no abonaron las facturas que incluían el aumento.

La demora en la impresión y distribución de nuevas facturas, con tarifas previas al aumento y bonificaciones para aquellos que hayan abonado la anterior, tuvo que ver con una serie de consideraciones que el Gobierno dispuso que figuren en esta serie de facturas. Desde Edenor ya lograron, previo rediseño, la impresión y ayer comenzó la distribución.

A partir del pedido oficial, una leyenda roja con el lema “cliente subsidiado” atraviesa la factura y en el detalle de consumo aparece discriminado qué parte del mismo está subsidiado. Además, en un volante por separado figuran las comparaciones con el consumo eléctrico en Santiago de Chile, Montevideo, San Pablo y en las provincias de Córdoba y Santa Fe. En cambio, desde Edesur afirman que les demorará entre 10 y 15 días hacer los cambios correspondientes en las facturas. Luego comenzará la distribución.

Por otra parte, las dos empresas comenzaron a distribuir una nota de pago, para aquellos usuarios que, afectados por el aumento, no abonaron la factura. La nota, que le llegará al 3 por ciento de los usuarios residenciales de Edenor, tendrá un plazo de vencimiento de unos 10 días y viene a reemplazar a la boleta previa, que contenía el aumento.

La distribución de las facturas con las correcciones permite regularizar la situación de aquellos usuarios que consumieron más de 1000 kilowatt en el bimestre junio-julio y por ello fueron afectados por el aumento. El “tarifazo” había sido diseñado, en el marco de lograr un alivio fiscal, suponiendo que aquellos que más consumen son “los que más tienen”.