La soja, el maíz, el girasol y el sorgo volvieron a subir ayer por las mayores compras de los operadores que buscaron anticiparse al cese de comercialización y la fuerte demanda del mercado internacional, sobre todo después de que el Departamento de Agricultura de Estados Unidos revisara a la baja sus previsiones de producción. La soja cotizó a 1440 pesos en promedio con descarga inmediata, 10 pesos más que el miércoles, aunque los máximos llegaron a 1480 pesos. La cotización del grano avanzó 45,4 por ciento en el último año y los productores se benefician no sólo con la fuerte cosecha actual sino con los saldos de la anterior.

Para el maíz, la exportación pagó 730 pesos la tonelada con descarga inmediata (20 más que el miércoles), mientras que por el cereal de la próxima campaña, con entrega en mayo-junio, se pagaba 193 dólares (8 más que en la rueda anterior). El cereal acumula un incremento de 48,6 por ciento en doce meses. Por otra parte, las fábricas pagaban por el girasol disponible 1540 pesos la tonelada con descarga inmediata, el mismo valor que el miércoles, pero 66,4 por ciento más elevado que el que percibieron los agricultores un año atrás. Para el girasol de la próxima campaña, en tanto, se pagaban 380 dólares (10 más que el miércoles) la tonelada con entrega en febrero-marzo en Junín, igual que para marzo en Rosario y San Jerónimo. Por el sorgo, por su parte, se pagó a los productores 630 pesos (10 más que el miércoles) la tonelada con entrega inmediata, con lo cual la mejora es de 53,6 por ciento en el último año.

Las cotizaciones de esos cultivos muestran que los productores se están beneficiando de un momento excepcional, independientemente de las discusiones en torno del trigo. En el mercado local de trigo no hubo compradores interesados en realizar negocios, pese a que el Gobierno anunció la liberalización de exportaciones del grano por un total de 3 millones de toneladas restantes del saldo exportable. A estos datos se suman los ingresos extraordinarios que le vienen aportando a los productores la carne y la leche, dos productos que mejoraron notablemente su cotización durante 2010.

Las perspectivas para los próximos meses también son alentadoras. El documento del Departamento de Agricultura de Estados Unidos, que aborda el estado de la oferta y la demanda de materias primas agrícolas en el mundo, impulsó las cotizaciones de la soja y el maíz al dejar al descubierto la reducción de las reservas finales de la campaña 2010/2011. En reacción, los contratos de estos dos cultivos alcanzaban los niveles más altos desde el verano boreal de 2008. “Las compras continúan, tras la fuerte reacción del mercado posterior al informe”, explicó Don Roose, de US Commodities. “El objetivo es intentar alcanzar niveles de precios que permitan ralentizar la demanda”, añadió. En el mercado local, el lockout que comenzará la semana próxima no alterará este escenario, pues para los productores no tendrá ningún costo.