El déficit presupuestario de Estados Unidos alcanzó en julio los 129 mil millones de dólares y acumula en diez meses, desde que comenzó el año fiscal en ese país, un resultado negativo de 1,1 billón de dólares. Sobre esas cifras del Tesoro norteamericano comenzarán a trabajar los miembros del flamante “supercomité” bipartidista encargado de elaborar el plan a largo plazo para reducir el déficit presupuestario. El grupo de legisladores deberá consensuar una propuesta antes del 23 de noviembre.

El ajuste en las cuentas fiscales limitará el financiamiento de programas destinados a los sectores más vulnerables de la sociedad estadounidense y repercutirá en forma negativa sobre la demanda agregada y el empleo.

Los datos correspondientes al déficit de julio son 5,9 por ciento más bajos que los registrados el mismo mes el año pasado. A lo largo del año fiscal 2011, que concluye en septiembre, se prevé que el gasto público aumente 2,4 por ciento y los ingresos del fisco, 8 por ciento.