El dólar avanzó ayer un centavo, a 4,19 pesos en su cotización al público. Este leve reacomodamiento fue definido por el Banco Central, que participó de la rueda absorbiendo dólares. El saldo de su intervención fue una compra neta de 25 millones de dólares. No obstante, el stock de reservas se redujo levemente, a 50.268 millones de dólares, debido a que la entidad que conduce Mercedes Marcó del Pont saldó vencimientos con organismos multilaterales y al retroceso del oro, uno de los activos que mantiene el Central en cartera. El metal estrella del mercado global descendió 1,8 por ciento, 1751 dólares la onza. Fuentes oficiales y operadores de la city coinciden en que existe una menor demanda privada de dólares, y no descartan que, luego de las primarias de este domingo, la tendencia vuelva a ser vendedora.

La tensión de “lunes negro”, donde el Central debió salir a vender cerca de 150 millones de dólares, se fue desarticulando con el transcurso de los días. Los montos operados en el mercado de cambios y el giro en la intervención del Central son muestra de esta situación. Ayer se negociaron unos 500 millones de dólares, significativamente inferior al ya bajo volumen del miércoles, cuando se registraron unos 700 millones. Lo mismo sucedió en las operaciones con contratos a futuro. Ese mercado operó, con 100 millones, menos de la tercera parte de la rueda anterior. El Central, por su parte, adquirió 25 millones de dólares, que se suman a los casi 50 millones que compró anteayer.

La rueda se mostró equilibrada. No obstante, las primeras operaciones de la mañana registraron una leve demanda que superó lo ingresado por exportadores. “Existen muchos exportadores que están reteniendo sus liquidaciones a la espera de que el panorama internacional se aclare, para asegurarse un mejor precio para su cosecha”, explicó a este diario un colaborador de Marcó del Pont. Habitualmente, por estos días suele finalizar la liquidación de la cosecha gruesa, pero la crisis financiera en los países centrales postergó ese ingreso. Según relató un operador de la city a Página/12, el Nación realizó una operación puntual que niveló fuerzas en la plaza. La entidad habría vendido unos 70 millones de dólares. Sobre el final, el Central aprovechó para recomponer reservas, dándole un leve empujón al dólar mayorista. De inmediato, las agencias del microcentro ajustaron sus pizarras un centavo.

En lo que va de este año, el billete estadounidense lleva una apreciación acumulada frente al peso de 18 centavos, un 4,5 por ciento por encima de los 4,01 pesos con que finalizó el último día hábil de 2010. Durante agosto avanzó dos centavos. Informes de consultoras privadas apuntan a que la suba escalonada que propone el Central se va a mantener hasta fin de año. La divisa mantiene en el mercado local un ritmo de apreciación estable de entre dos y tres centavos por mes. La serie que podría componerse con los movimientos de la divisa son: en enero (dos centavos), febrero (tres), marzo (uno), abril (cuatro), mayo (uno), junio (dos), julio (tres) y en lo que va de agosto, dos centavos. Esas cifras muestran que el BC no tiene vocación de una aceleración en la suba del dólar frente al peso, argumento que algunos analistas utilizan para justificar la persistente fuga de divisas.