La actividad industrial terminó agosto con una suba de 1,1 por ciento frente al mismo período del año pasado, mientras que acumula en los ocho primeros meses una caída de 0,7 por ciento, informó ayer el Indec. El desempeño de agosto fue flojo para el sector textil, químico, siderúrgico y metalúrgico. En cambio, mejoraron los materiales de la construcción, papel y edición y automotriz. Para el corriente mes, el 80,2 por ciento de los empresarios preveía un ritmo estable de demanda, el 12,9 una baja y apenas el 6,9 por ciento esperaba un alza en las ventas. En la comparación mensual frente a julio, la industria nacional bajó 0,1 por ciento.

Según la medición del organismo oficial de estadísticas, el nivel de actividad industrial en agosto está apenas por encima del que se registraba el año pasado, aunque es menor a los valores para el mismo mes de 2013, 2012 y 2011. Eso muestra el estancamiento de la actividad manufacturera en los últimos años, después de haber crecido fuertemente desde 2003 en base a los costos bajos en dólares y al aumento de la demanda interna gracias a subas salariales superiores a la inflación. En la actualidad, la manufactura enfrenta restricciones de oferta, por la limitada cantidad de dólares (la restricción externa) y también por el lado de la demanda, ya que los salarios no superan a la inflación.

A nivel sectorial, la industria alimenticia creció en agosto 1,1 por ciento y acumula en el año un avance de 1,4 por ciento. El rendimiento en el mes estuvo traccionado por la molienda de cereales y oleaginosas, que pudo compensar las bajas de lácteos, azúcar y productos de confitería, yerba, mate y té. También subieron carnes rojas y bebidas.

En cambio, la actividad del sector textil bajó 7,2 por ciento en agosto a partir de la caída en hilados de algodón, fibras sintéticas y artificiales y también de tejidos. En el año la merma es del 8,3 por ciento. Otro sector que en el año registra una merma es la siderurgia, con una baja de 8,1 por ciento, mientras que durante el mes pasado la reducción de la actividad fue de 0,7 por ciento, explicado por aluminio y acero.

Dos sectores con dispar desempeño en el mes respecto de la tendencia anual son el automotor y la metalúrgica. A pesar de ser actividades vinculadas, presentan un comportamiento opuesto. Los autos vienen de un mal año, con una caída del 9,4 por ciento en el acumulado en primer lugar a raíz de la situación de la economía brasileña, hacia donde se dirige el 80 por ciento de las exportaciones. En cambio, en agosto el sector mostró una suba de 7,3 por ciento gracias a ventas locales que crecieron 16,6 por ciento, que compensaron la caída del 22 por ciento de las exportaciones. En el extremo opuesto, la metalúrgica sostiene una suba de 2,8 por ciento en el año a pesar de que el mes pasado anotó una baja de 2,9 por ciento.

La industria de materiales de la construcción subió 4,7 por ciento en agosto. A pesar de la evolución del vidrio (-1,3) y el cemento (-2,8), el rubro otros materiales, donde hay cerámicas, ladrillos y hierro redondo, creció 12,8 por ciento. Los minerales no metálicos, según la definición del Indec, acumulan un alza en el año de 5,4 por ciento. El indicador específico del sector de la construcción registra en siete meses una suba del 8,5 por ciento.

La actividad del sector de sustancias y productos químicos está estable en el año, aunque en agosto tuvo una caída de 3,8 por ciento, traccionada por gases industriales (-6,5), agroquímicos (-12,9) y productos farmacéuticos (-5,6 por ciento). Productos de caucho y plástico subieron en el mes 2,9 por ciento y 3,2 en el año, mientras que refinación y petróleo, 1,9 y 4,3 por ciento, respectivamente. El mes pasado, Papel y Cartón creció 6,7 y edición e impresión, 4,4 por ciento.

Según la encuesta mensual que realiza el Indec, el 80 por ciento de los empresas anticipaba un ritmo estable de la demanda para este mes, el 12,9, una baja y el 6,9 un alza. En cuanto a las exportaciones, también el 80 por ciento preveía estabilidad pero el 12,1 por ciento vislumbró subas.