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Por M. M.

Puede sonar a chiste malo. Pero es la cruda realidad. El Gobierno definía anoche, con idas y vueltas, el siguiente cronograma de liberación al corralito: en abril, se podrían empezar a retirar los depósitos de hasta 5000 pesos, y recién en julio se podría hacer lo propio con los depósitos de hasta 5000 dólares. En ambas situaciones, las extracciones no podrían realizarse de una sola vez sino en cuotas. ¿En cuántas cuotas?, preguntó ayer Página/12 a un funcionario del equipo económico. “En varias”, fue la lacónica respuesta. Pese a lo que se había prometido, el Gobierno no pudo anunciar oficialmente ayer el cronograma de liberación del corralito, ni el levantamiento del feriado bancario y cambiario, que continuará hoy, ni el acuerdo con los bancos para asegurar la pesificación de los créditos. También quedó para hoy el anuncio de que se podrá extraer de las cuentas sueldos 1500 pesos mensuales y del resto de cuentas a la vista hasta 1200. Tampoco hubo decreto que especificara cómo deberán liquidar sus divisas los exportadores a 1,40 peso y qué importaciones se podrán hacer a esa paridad. Lo que sí hubo fue una presión pocas veces vista de los bancos extranjeros, que hasta amenazaron con retirarse del país si el Gobierno no daba marcha atrás con el esquema de pesificación de créditos y cerraba con candado las puertas del corralito.
“Vamos a tomar todas las medidas necesarias para encaminar la economía. Estamos convencidos de que éste es el rumbo. Nuestra firmeza es total”, afirmó casi sobre la medianoche a este diario el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich. El día había transcurrido entre las fuertes presiones de los bancos y las vacilaciones del Gobierno que terminaron postergando la difusión de los decretos más esperados. “Son salvajes”, reflexionó un integrante del equipo económico, después de las negociaciones encaradas por el Gobierno con los bancos.
Los bancos dicen que el esquema planteado con la pesificación de préstamos no es viable. El Gobierno pretende compensarlos por la devaluación del 30 por ciento con un fondo de 5000 millones, que se integraría con lo recaudado por los derechos a las exportaciones petroleras (1000 millones) y préstamos internacionales. Pero los bancos argumentan que ellos deberán comprar los dólares para devolver los depósitos en el mercado libre, que ayer cotizó en los “arbolitos” a 1,60. Y que si ese dólar se disparara a 1,80 o más, entonces la devaluación que deberían afrontar sería del 45 por ciento o más. Además, sostienen que es inadmisible que se prohíban cláusulas de indexación por inflación en las cuotas pesificadas.
El ministro Jorge Remes Lenicov se reunió por la tarde con la cúpula de ABA, que nuclea al Galicia y a los mayores bancos extranjeros que operan en el país. Para tener una idea de la tensión de las negociaciones vale el siguiente ejemplo. Allí estuvo presente Enrique Cristofani, el titular del Banco Río/Santander Central Hispano. Mientras Cristofani le sonreía al ministro, su banco emitió un informe titulado: “El plan económico de Duhalde: un salto en la oscuridad”, donde se advierte que:
- “Los bancos que operan en el país están siendo empujados a la bancarrota”.
- “Las compañías con alto endeudamiento en dólares están técnicas quebradas”.
- “Los 33.000 millones de dólares que las empresas locales les deben a los bancos ponen una presión insostenible sobre el sistema financiero”.
- “La pesificación pone en peligro todo el sistema de crédito en Argentina”.
En este contexto, el Gobierno no había terminado de redactar anoche el decreto que establece el cronograma de liberación del corralito. Pero, según el borrador que circuló a última hora por el Ministerio de Economía, y sobre el que hubo un principio de acuerdo con los bancos, la secuencia sería la siguiente:
- Los depósitos de hasta 5000 pesos podrían empezar a retirarse dentro de 90 días, pero en cuotas.
- Los depósitos de hasta 5000 dólares deberían esperar 180 días, para empezar a retirarse también en cuotas.
Nadie podía precisar anoche si el número de cuotas sería 5 o 10, pero los funcionarios coincidían en que serían “varias”. Tampoco había nada definido respecto de los depósitos de mayor valor.
Lo único seguro es que hoy sí se anunciará que, a partir de mañana, se podrán extraer hasta 1500 pesos de las cuentas sueldo, y hasta 1200 pesos para el caso de los cuentapropistas.
Por otro lado, tanto en Economía como en el Banco Central aseguraban que una vez que se levante el feriado cambiario y bancario se deberán respetar las siguientes reglas:
- Como anticipó Página/12, no podrán pasarse cuentas de pesos a dólares. Ni efectuar ninguna operación cambiaria dentro del corralito
- Se podría endosar las plazos fijos para efectuar compras. Pero no se podrá transferir un plazo fijo de un banco a otro.