La producción industrial en marzo creció 6,8 por ciento en relación con igual mes del año pasado y acumula un 6,6 por ciento de aumento en el primer trimestre. El sector automotor continúa liderando la expansión industrial, que repuntó en marzo, aunque a un ritmo más lento que durante el año pasado. “La industria fue un factor decisivo del crecimiento del producto bruto interno, muchísimo más importante, aunque parezca mentira por los propios números que se manejan, que los desarrollos del agro”, disparó ayer Néstor Kirchner durante el lanzamiento de un nuevo modelo en una planta automotriz.

Durante la inauguración de la línea de producción nacional del nuevo Citroën C4, que la empresa francesa Peugeot Citroën puso en marcha en la localidad bonaerense de Villa Bosch, Kirchner había adelantado por la mañana los números que el Indec difundió por la tarde. “Nuevamente el crecimiento industrial está marchando a ritmos verdaderamente muy buenos, donde la economía argentina creció en los dos primeros meses del año a 8,2 por ciento”, afirmó el Presidente. Y aprovechó ese ámbito para lanzar dardos al campo, con cuyos dirigentes mantiene una relación delicada.

Sostuvo que la industria tiene un peso mucho mayor en el crecimiento económico y la creación de empleo que el campo, aunque “pareciera ser que mediáticamente es distinto”.

Según informó el Indec, en marzo, el Estimador Mensual Industrial (EMI) creció 6,6 por ciento desestacionalizado y 7 por ciento con estacionalidad, dato que citó el Presidente. Entre los sectores que más aumentaron su producción se destacan la fabricación de vehículos (20,7 por ciento) y la producción de sustancias químicas (10 por ciento), con un gran aporte del sector agroquímicos (18,9 por ciento), al igual que los detergentes, jabones y productos personales (18,8 por ciento). La refinación de petróleo creció 8,6 por ciento, mientras que la fabricación de productos minerales no metálicos subió un 6,8 por ciento.

Entre los sectores que crecieron menos que el promedio general sobresalen caucho y plástico (6,2 por ciento), papel y cartón (5,9 por ciento), alimentos (2 por ciento) y textil (0,7 por ciento). La única caída corresponde a la producción de metales básicos (acero y aluminio primario), que disminuyó 5 por ciento en marzo.

Por otro lado, la utilización de la capacidad instalada en la industria alcanzó un 73,4 por ciento en marzo, mientras que en el primer trimestre llegó al 71,5 por ciento, similar al registro del mismo período del año pasado. El hecho de que haya aumentado la producción y se mantengan los niveles de utilización de capacidad instalada indicaría que ha habido inversiones relevantes en la industria durante el último año.

Desde el punto de vista sectorial, los bloques industriales que presentaban una mayor utilización de la capacidad instalada en marzo fueron la refinación del petróleo, las industrias metálicas básicas y la producción de papel y el cartón. En cambio, los sectores con mayor capacidad ociosa son todavía las terminales de vehículos automotores, la metalmecánica y los minerales no metálicos. Dicho de otro modo, más allá de que haya nuevas inversiones o no, en estos sectores todavía hay margen para seguir creciendo con los actuales niveles de inversión.

En cuanto a la encuesta cualitativa del Indec, sólo uno de cada cinco empresarios prevé tomar personal durante el segundo trimestre del año, mientras que el 75 por ciento restante no planeaba aumentar la dotación de empleados.