Los dirigentes de las entidades rurales criticaron ayer el acuerdo firmado el viernes para bajar el precio de la carne. El presidente de Carbap, Pedro Apaolaza, afirmó que “fue una imposición de la Secretaría de Comercio a todos los sectores que están más controlados”. Agregó que “está muy satisfecho” por no participar de este tipo de convenios y sostuvo que “deslindamos todo tipo de responsabilidad sobre un acuerdo que, desde ya, va al fracaso”. Luciano Miguens, titular de la Sociedad Rural, sostuvo, por su parte, que “los controles de precios y/o la acotación de las exportaciones hacen que no haya estímulo para el productor ganadero”. Otro que se manifestó en contra fue Eduardo Buzzi, titular de Federación Agraria: “Si el convenio implica una baja de precios para los productores va a haber bronca. El martes nos manifestamos para protestar por el precio del trigo y ahí también evaluaremos la situación de la carne”. Silvio Etchehun, titular del sindicato de trabajadores de la carne, también se mostró escéptico y aseguró que el próximo miércoles se movilizarán al Mercado de Liniers, junto con entidades sociales, para proponerle a la ciudadanía que se abstenga de comer carne. Además, sostuvo que “si los cortes populares pueden bajar de precio sin la adhesión de los productores rurales es porque los frigoríficos están obteniendo grandes ganancias. Por lo tanto, vamos a pedir un aumento de sueldos”.