El fuerte aumento registrado en el precio internacional de la soja en las últimas semanas se calmó ayer. La cotización de la oleaginosa para entrega inmediata cerró en 430,1 dólares la tonelada en el mercado de Chicago, 1,7 por ciento por debajo del cierre anterior. La razón de esa leve caída fueron la firmeza del dólar, que presionó sobre la cotización de los productos agrícolas, y los mejores pronósticos meteorológicos en las regiones de cultivo de Estados Unidos. La soja estuvo entre los productos menos afectados por estas situaciones. El trigo para entrega en septiembre se pagó a 183,8 dólares la tonelada, una merma del 10,5 por ciento. La harina producida con el popular cereal descendió 1,2 por ciento, hasta los 405,1 dólares. Pese al retroceso registrado en el mercado externo, el precio de la soja no mostró cambios en la bolsa de cereales de Rosario y se negoció a 1000 pesos la tonelada. La oleaginosa continúa siendo el producto más buscado, pero el interés de los vendedores está en valores superiores, señaló el informe de la entidad.