Los precandidatos presidenciables de distintas fuerzas políticas tuvieron ayer oportunidad de explicar el trazo grueso de sus respectivas agendas en caso de ser elegidos. “En la medida en que nos acerquemos al autoabastecimiento energético se irá solucionando el frente externo”, aseguró el ministro de Defensa y precandidato por el Frente para Victoria, Agustín Rossi, quien descartó cualquier tipo de ajuste para reducir el ritmo de suba de precios. En el extremo opuesto se ubicó el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, quien consideró que el problema energético responde a “una de las peores políticas del gobierno peronista de las últimas décadas”, pese a que luego rescató lo hecho hasta el momento en YPF –antes el PRO se había opuesto en el Congreso a su recuperación por el Estado–. Por su parte, el senador nacional y precandidato presidencial Ernesto Sanz sostuvo que es necesario cambiar la matriz energética y llevar a cabo una reducción del gasto público.

Durante las dos jornadas de la 20ª Conferencia Industrial Argentina se llevaron a cabo paneles individuales con algunas de las figuras políticas con aspiraciones presidenciales para el año próximo. El día anterior había sido el turno del diputado por el Frente Renovador Sergio Massa. En el espacio de Rossi estaban anunciados los precandidatos Julián Domínguez, presidente de la Cámara de Diputados; Florencio Randazzo, ministro de Interior y Transporte, y Sergio Urribarri, gobernador de Entre Ríos. Los tres compañeros de Rossi no asistieron. El santafesino comenzó su discurso afirmando: “No me gusta hablar de clima de negocios, sino de clima de desarrollo”. Consideró que las perspectivas para el país son más que interesantes, tras lo cual detalló una serie de hechos que apuntalan la posición del país. “La recuperación de YPF, los yacimientos de combustible no convencional y la reciente Ley de Hidrocarburos permiten un horizonte de autoabastecimiento para el país”, enumeró.

El jefe de Gobierno porteño advirtió que “tiene que haber un responsable de la política que no quiera controlar todo, que no crea que una persona sola tiene que tener la suma del poder público”. Aseguró que derogará las reformas del Código Procesal Penal que impulsó el kirchnerismo, porque esas normas no se pueden aprobar “imponiendo una mayoría circunstancial en el Congreso”. Sanz insistió en la necesidad de eliminar trabas como el cepo cambiario, aunque aclaró que –de llegar al gobierno– las medidas “se verán con el tiempo”. El senador radical, quien sostuvo que no hablaría de medidas económicas, consideró que quien quiera ser presidente en 2015 deberá “el primer día desde el atril y por cadena nacional dejar atrás la corrupción”.