Economistas de los candidatos presidenciables de la oposición coincidieron ayer en las recetas de ajuste para hacer descender la inflación. “La inflación es resultado del populismo. No se puede estimular la demanda constantemente”, sostuvo Javier González Fraga, en representación del FA-Unen, durante un panel en la 20ª Conferencia Industrial Argentina. “Acá hay un problema de descontrol fiscal y del gasto”, se sumó Carlos Melconian, economista del PRO. Algo más moderado se posicionó Miguel Bein, asesor del gobernador bonaerense y candidato Daniel Scioli, quien sostuvo que “el modelo basado en estimular la demanda ya no va más”. Por su parte, el economista del massismo, Miguel Peirano, habló de gradualismo en las políticas antiinflacionarias a partir de alcanzar en el corto y largo plazo equilibrio fiscal.

González Fraga afirmó que las políticas populistas llevan a que “los empresarios prefieran subir los precios antes que invertir”. “No soy monetarista, pero eso no impide que haya que controlar la inflación”, agregó. “Los economistas podemos juntarnos en una mesa y bajar la inflación inmediatamente. Pero después no sabremos con qué nos vamos a encontrar afuera”, sostuvo Bein. Por último, abogó por un ahorro en pesos bien remunerado para fortalecer la moneda. Melconian afirmó que los problemas de la Argentina no tienen que ver con lo que sucede en el mundo. Por su parte, Peirano insistió sobre la idea de una visión estratégica, que implique un fuerte desarrollo industrial con alta participación tecnológica.