ECONOMíA › EMPRESARIOS Y EXPERTOS EVALUAN LA RELACION CON CHINA
Habrá amor pero sin exagerar
“La gente está esperando que China venga a poner 20 mil millones de dólares y eso no va a pasar, ni es el espíritu de lo que quiso decir el Poder Ejecutivo. Lo que va a pasar es lo lógico: establecer un marco jurídico para inversiones en áreas bien específicas”, dijo el director ejecutivo de la Cámara de la Producción, Industria y Comercio Argentino China, Ernesto Fernández Taboada.
El empresario, al igual que otros hombres de negocios vinculados al mercado asiático, buscó bajarles el tono a las especulaciones oficiales sobre el plan de megainversiones que estaría dispuesto a financiar el gobierno de Beijing en Argentina. Aunque reconocieron que en la semana se firmarían varios protocolos comerciales para establecer un marco jurídico a futuras inversiones, aclararon que éstas no serían de desembolso inmediato sino que llegarían, en el mejor de los casos, a mediano y largo plazo.
El presidente de la Cámara, Julio Werthein, tampoco se animó a hablar de cifras porque aún “no empezamos la acción”, y si bien reconoció que “se van a hacer muchas cosas” con China, se limitó a revelar que “el proyecto más avanzado es el de la limpieza de las aguas del Riachuelo y del río Matanza”.
Según Fernández Taboada, “cualquiera sea el monto (de las inversiones) se va a desembolsar a mediano y largo plazo”, porque “a los chinos les interesa invertir en áreas donde tienen necesidad de fuentes de aprovisionamiento”, esto es “en energía, en particular en petróleo y minería, y estas nunca son inversiones a corto plazo”.
Al respecto, señaló que “hay dos petroleras estatales chinas que están interesadas en colaborar con Enarsa, ya que China es el segundo importador mundial de petróleo y tiene siempre necesidad de crudo, aunque hoy su mayor inversión en este rubro está en Venezuela”, explicó. Por ahora, en concreto, sólo habría inversiones en los sectores tabacalero (China es el primer consumidor mundial) y turismo. Los especialistas consideran que también podría haber inversiones en el sector ferroviario. En cambio, Fernández Taboada descartó la posibilidad de que un futuro acuerdo incluya al sector de alimentos, porque “China ya los está recibiendo de Argentina”.
Para Sergio Cesarín, investigador del Conicet y experto en Asia, la cifra de 20.000 millones de dólares suena utópica. “Me cuesta entender que China vaya a realizar inversiones de tal magnitud cuando en los últimos quince años el monto total de los capitales que las empresas de esta nación ingresaron al país no supera el millón y medio de dólares”, aseguró.
El experto destacó que el acuerdo se daría en un contexto en el que “el interés de China combina la ausencia política que Estados Unidos ha tenido en la región, con su deseo de ganar protagonismo en el escenario mundial, en un momento histórico que aproxima a América latina ideológicamente con el gigante asiático”.
Por su parte, el director del Observatorio de China del Instituto de Estrategia Internacional de la Cámara de Exportadores Argentina (Cera), Carlos Tramutola, calificó una alianza argentino-china como “estratégica” y, por lo tanto, con “resultados a mediano y largo plazo”, manifestando los mismas observaciones que sus colegas.
Fernández Taboada manifestó que el área minera podría ser una de las beneficiadas por las eventuales inversiones. Explicó que si bien China posee “amplísimos” recursos en ese sector, muchos de ellos se encuentran agotados por sobreexplotación. Nosotros tenemos más del 50 por ciento sin explotar”. También mencionó la chance de obras ligadas a los trenes.
China opera 65.000 kilómetros de líneas ferroviarias y podría ser proveedor de material para ese sector. A su vez, el dirigente dejó entrever la posibilidad de que la Argentina le otorgue directamente la operación de alguna línea férrea.