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El gobierno español dejó claro que el hecho de que dos presuntos etarras afirmasen haber recibido instrucción en Venezuela no significa que estuviesen implicadas las autoridades de Caracas. El gobierno de Hugo Chávez ya negó todo vínculo con la organización separatista vasca y denunció una campaña internacional de difamación.

El ministro de Interior del gobierno de Zapatero, Alfredo Pérez Rubalcaba, habló de la falta de evidencia para acusar a Chávez. “No hay ningún dato, ninguna afirmación de ninguno de estos etarras que permita inferir, colegir, ni tan siquiera sospechar que el gobierno venezolano tuviera algo que ver con eso. Esto quiero que quede bien claro.”

Los presuntos miembros de ETA Juan Carlos Besance y Xavier Atristain declararon en un interrogatorio ante la Guardia Civil que siguieron “cursillos de formación” en julio y agosto de 2008 en el país caribeño, según un auto de la Justicia española difundido el lunes.

Rubalcaba dijo además que el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero no duda de la “verosimilitud” de la confesión de los presuntos etarras. Pero indicó que ha solicitado a las autoridades venezolanas que investiguen “a fondo si este suceso tuvo lugar y en su caso la participación de algún posible ciudadano venezolano”. El ministro precisó: “Me estoy refiriendo a Arturo Cubillas, que tiene una relación seria con ETA”.

El gobierno bolivariano dijo que “refuta y desmiente cualquier aseveración que pretenda vincularlo con la organización terrorista ETA, cuyas actividades rechaza sin paliativos”. Ayer, el canciller venezolano Nicolás Maduro denunció, haciendo alusión a la derecha española, una “campaña de difamación” contra su presidente, al tiempo que precisó que los gobiernos de Caracas y Madrid tienen “excelentes relaciones”.

Por su parte, el embajador venezolano en España, Isaías Rodríguez, señaló que su país duda acerca de cómo provino la información dada por los supuestos miembros de la banda. “Tenemos serias dudas de que estas declaraciones, por falsas y maliciosas de parte de quienes las emitieron, hayan sido totalmente voluntarias.”

Y su par en Washington, Bernardo Alvarez, denunció una “clara línea de agresión” contra su país desde España porque “siempre tratan de mostrar” que Venezuela “está protegiendo o trabajando con terroristas”.