El senador republicano Marco Rubio, legislador cubano-norteamericano afín al sector anticastrista más radical, cuestionó las medidas anunciadas en Washington. “Esto es un golpe de suerte para el régimen de (Raúl) Castro, que lo utilizará para financiar su represión contra los cubanos, así como sus actividades contra los intereses nacionales en América latina”, afirmó el legislador. Además, Rubio cuestionó la legalidad de la decisión tomada por el presidente Barack Obama. “Ayer solicité respuestas al secretario (del Tesoro, Jacob) Lew sobre cómo se aplicaría esta nueva política hacia Cuba sin violar la letra y el espíritu de varias leyes de Estados Unidos y sin aumentar el riesgo moral y financiero para el contribuyente estadounidense”, añadió el senador.