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El titular de la Cámara de Diputados, Severino Cavalcanti, acusado de recibir coimas, se reunió con el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, en un encuentro a puertas cerradas durante cerca de una hora, y se aseguró que hoy presentará su renuncia, mientras gobierno y oposición disputan su sucesión. La intención del encuentro del presidente Lula con el diputado Cavalcanti, del Partido Progresista (PP, derecha), integrante de la coalición oficialista, era asegurar la “preservación de aliados que ocupan cargos en la administración federal”.
Lula recibió a Cavalcanti con la intención de mantener al ministro de Ciudades, Marcio Fortes, también del PP, y “por lo menos en un primer momento” al hijo de Severino, José Maurício Cavalcanti, que tiene un cargo federal en el estado de Pernambuco. En una reunión con cinco ministros, Lula reconoció, antes del encuentro con Cavalcanti, que el gobernante Partido de los Trabajadores (PT) está “débil” y por eso debería abrir la mano a sus aliados en la disputa por la sucesión de la presidencia de la Cámara de Diputados.