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La intervención norteamericana en Colombia no se detiene. Estados Unidos entregó hoy a Bogotá otros 14 helicópteros para la lucha contra el narcotráfico y anunció que en los próximos meses iniciará el entrenamiento de una segunda brigada militar antinarcóticos, según informaron fuentes oficiales. Los aparatos, de tipo Black Hawk, fueron recibidos por el presidente Andrés Pastrana y el alto mando castrense en una ceremonia celebrada en la base militar de Tolemaida (centro-oeste), a la cual también asistió la embajadora de Washington en Bogotá, Anne Patterson. La diplomática señaló que la entrega forma parte de los compromisos que contrajo el gobierno de Washington con Bogotá en el marco del Plan Colombia de lucha antidrogas, al cual contribuye Estados Unidos con 1.300 millones de dólares, representados en su mayoría en entrenamiento y ayuda militar.
“Continuaremos apoyando al gobierno colombiano en su lucha contra la producción de cocaína y heroína, para fortalecer el imperio de la ley y promover alternativas legales a los cultivos ilícitos”, afirmó Patterson. La funcionaria anunció que su país donará 625 millones de dólares más a Colombia y países vecinos, en cumplimiento de la Iniciativa Regional Andina, así como la puesta en marcha de un programa especial de entrenamiento a las fuerzas armadas. Patterson explicó que ese plan de asistencia prevé la entrada en operación de una segunda brigada militar, especializada en la lucha antidrogas y cuyo campo de acción abarcará todo el territorio colombiano. El presidente Pastrana expresó su agradecimiento al gobierno estadounidense y anunció, por su parte, que en los próximos meses llegarán a Colombia los 25 helicópteros que fueron enviados a Washington para ser sometidos a reparaciones. Según el mandatario, con la entrega de esos aparatos se completará una flotilla de 74 aeronaves que tendrá la exclusiva misión de combatir al narcotráfico, sugestivamente presentado como “narcoguerrilla”.