La agonía política peruana parece interminable. Ayer, la derechista Lourdes Flores, de Unidad Nacional (UN), se resistía a aceptar su derrota y presentó impugnaciones ante el Jurado Nacional de Elecciones (JNE), “para que corrija los votos en aquellas actas o lugares donde nos parece que por error nuestros votos han sido asignados a otros”, apuntó, además de agregar que mantiene su “optimismo” en pasar a la siguiente vuelta.

Luego de computarse el 99,25 por ciento de los votos, el socialdemócrata Alan García cuenta con 24,32 por ciento de los sufragios, en tanto que Flores llega a 23,70. Humala, con su pase asegurado a la segunda vuelta, acumula el 30,69 por ciento. La actitud de UN generó críticas incluso al interior de la alianza, ya que es casi imposible que las impugnaciones puedan revertir el resultado, aun si todos los fallos le son favorables.