La comisión creada por la OEA para analizar el reciente conflicto entre Colombia y Ecuador se reunió ayer con el gobierno de Quito. Después de que se resolviera la crisis diplomática entre ambos países, el presidente ecuatoriano Rafael Correa le dio las gracias al secretario general del organismo, José Miguel Insulza. “Queremos agradecerte, Miguel, la prontitud con que la OEA atendió nuestro pedido de convocar al Consejo Permanente, de ratificar la inviolabilidad de los territorios nacionales y la soberanía de los Estados”, señaló. La misión encabezada por Insulza visitará hoy el sitio donde el ejército colombiano asesinó a 25 miembros de las FARC en suelo ecuatoriano y de-sató la crisis entre Quito y Bogotá. Por su parte, Venezuela ordenó retirar las tropas que había enviado a la frontera con Colombia, mientras que Ecuador las mantuvo.

La resolución que adoptó la OEA el miércoles pasado, cuando Colombia y Ecuador acordaron crear una comisión, se puso en marcha ayer. Junto a representantes permanentes de la Argentina, Brasil, Panamá, Perú y Bahamas, Insulza estuvo en palacio de Carondelet, sede del Ejecutivo, donde se entrevistó con Correa, y luego con la canciller María Isabel Salvador, el ministro de Defensa, Wellington Sandoval; y el de Seguridad Interna y Externa, Gustavo Larrea.

Durante la reunión, la autoridad de las Américas reiteró la importancia del respeto a la soberanía de los países que postula la OEA en su carta. “Hay que afirmar un conjunto de preceptos y principios que deben quedar afirmadas en la institución que fija el Derecho americano”, dijo. Pese a que el viernes pasado Colombia y Ecuador dieron por superada la controversia en la cumbre del Grupo Río, Insulza aseguró que aún camino hay por andar. “Todavía es necesario hacer una cantidad de gestiones y cerrar bien este proceso”, señaló. Asimismo recordó que la Asamblea de la OEA fue convocada la semana pasada para conocer los hechos que provocaron que Ecuador rompiera relaciones con Colombia. Para ello, la comisión de la OEA pretende recabar las evidencias de cada lado, y enviarlas a los cancilleres de la región que revisarán el tema el 17 de marzo.

Agradecido con su huésped, Correa destacó la conformación de la comisión y la convocatoria a una reunión próxima de cancilleres. “Sinceramente creía que mi propuesta de que Colombia se disculpara con Ecuador y se comprometiera a no repetir este tipo de operaciones en el país era la menos probable”, confesó. “Felizmente se dio en el Grupo de Río, de forma categórica y, en consecuencia, dimos por superada la tensión entre los dos países”, añadió.

Para lograr ese resultado, Insulza señaló horas antes de reunirse con Correa que el papel del presidente venezolano Hugo Chávez fue clave. “Su intervención fue muy decisiva, fue tremendamente constructiva”, dijo. “Chávez había dicho cosas muy duras. Sin embargo, esta vez hizo una gestión muy conciliadora y eso ciertamente jugó un rol muy importante”, añadió.

Sin embargo, el gobierno de Correa cree que Colombia debe hacer más. Por eso el ministro de Seguridad dijo que pedirá a la OEA que Bogotá proteja la frontera. “Vamos a pedir que Colombia ponga fuerza militar en su frontera. En el Grupo Río el presidente colombiano Alvaro Uribe abrió esa posibilidad y ahora hay que concretarla”, exigió.