EL PAíS › PENUMBRAS > EL RECONOCIMIENTO DE COLEGAS Y AMIGOS

“Era un elegido, tenía un don”

Susana Giménez: “Fue un grande al que hay que recordar no sólo como artista sino como un hombre con enormes ganas de vivir. Lástima que haya fumado tanto. Claro que en aquella época, cuando éramos jóvenes, no se veía tan mal que una persona fumara tres paquetes de cigarrillos por día. Encima, él siempre decía que por suerte el tabaco no le había afectado la voz. Eso es lo que le hizo peor, porque entonces seguía y seguía. Más allá de eso, se fue un hombre muy leal y muy educado. Hacía chistes permanentemente, pero sin llegar nunca a la guarangada ni a la palabra fuera de lugar. Siempre decía piropos, pero sólo con mirarte ya te tiraba al piso. ¡Y esa forma en que cantó, haciendo sentir a cada mujer que le estaba hablando a ella! Lo voy a seguir admirando siempre. Cuando rodamos juntos Tú me enloqueces nos dimos unos besos bárbaros... las escenas no terminaban nunca”.

María Marta Serra Lima: “Estoy muy shockeada porque creí que iba a zafar. Tuvimos un gran amor hace mucho tiempo, que él más tarde expresó en la canción “Cosas de la vida”, un tema que llegamos a cantar juntos. Un día mi hijo le preguntó: “¿che, de verdad sos gitano?”. El se puso de perfil y respondió: “mirame bien, soy una salsa de tomate Inca”, dando a entender que en el fondo era bien indio. Guardaba su intimidad para no incomodar a los demás, evitar malentendidos y no pelearse con nadie. Por eso vas a cualquier país y las personas lo adoran. No hay taximetrero de América que no lo conozca. Lógico: fue el primero de esa generación que se destacó, y en ese sentido abrió muchas puertas. Sencillo, accesible y buen amigo, además de vital”.

Jairo: “Hace unos diez días fui a cantar a Mendoza y me acerqué al hospital en el que estaba el Gitano. Y me acordé de lo que hizo cuando yo estuve muy enfermo, hace unos años: me llamaba todos los días. Yo estaba en terapia intensiva y él estaba siempre ahí. Era ese tipo de amigo. Cuando las enfermeras que me cuidaban se enteraron de eso, se peleaban por atender el teléfono porque sabían que podía ser él. Era una persona entrañable. Ahora que justo hablamos del tema teléfonos, me viene a la mente que él te llamaba –ponele– a las dos de la mañana y se quedaba horas conversando. Incluso me pedía charlar con mis hijos, les preguntaba cosas de la escuela, jugaba con ellos. Era así. Sencillo, humilde y generoso. Separaba mucho esos dos ámbitos. Sumamente honesto, además. Eso le permitía reírse de sí mismo y hacer gala de ese humor tan especial. Decía: “antes, mis discos eran populares en los albergues transitorios, y ahora son el hit de los geriátricos”. Un luchador alegre. Cómo nos hacen falta personas así”.

Mono (Kapanga): “Mi papá era bastante fanático de Sandro y una de las anécdotas familiares más comunes era de cuando lo presentó en la cancha de Argentino de Quilmes, en la época de Sandro y Los De Fuego. Mi viejo entró al camarín y Sandro ¡se estaba pintando los labios! Después, con Kapanga, cuando viajamos a Nueva York fuimos al Madison Square Garden, donde hay una cartelera, en la entrada, con los nombres de todos los que tocaron ahí. Sandro fue el primer artista latino en tocar en Nueva York y está en esa lista, fue muy emocionante, estando tar lejos, ver escrito su nombre”.

Luciano Scaglione (Attaque 77): “Los Attaque crecimos con Sandro en los tocadiscos de nuestras casas; primero por nuestros padres, tíos y hermanos mayores, más tarde por elección propia. Siempre hubo una fuerte imagen de Sandro ligada al rock y eso de pendejos nos pegó. Si bien Attaque fue por un lado más extremo, siempre tuvimos una tendencia muy melódica y un apego por la canción de amor. Sandro nos pegó por esos lados. Cuando se armó Tributo a Sandro (un disco de rock), había una lista muy grande de temas pero elegimos “Dame fuego” porque era el que más nos identificaba, el más “punk” de sus temas. El tuvo el gesto de mandarnos un champán con una tarjeta de agradecimiento, dándole el visto bueno a la versión, y no lo podíamos creer. Lo vimos luego en el Gran Rex, nos sacamos una foto en el camarín y charlamos un rato. Era un grande de verdad. Nunca perdió esa esencia de barrio.”

Raúl Porchetto: “Es una noticia lamentable, pero que se podía esperar. En la música popular van a quedar la vida y la obra de Roberto. Ya está en el corazón de la gente y ahora, a partir de su muerte, me parece que se va a magnificar. Fue de esas personas con una magia especial que está en el pueblo y queda en el pueblo. Fue un elegido que tenía un don, su talento, y una persona muy especial, con una ética, una cordura y una corrección que mantuvo durante toda su carrera.”

Teté Coustarot: “Lo quería muchísimo y no me esperaba su muerte. Era un guerrero, luchaba tanto, quería vivir tanto. Pensé que era invencible. Hasta en la enfermedad fue un ejemplo, la definición del hombre argentino: intachable, amoroso. Y además era un artista fenomenal. Calladito se fue a Estados Unidos y llenó teatros, nunca perdió el carril y fue sumamente generoso.”

Soledad Silveyra: “Sandro fue un hombre maravilloso. En los ’70 me ayudó y me contuvo mucho con problemas familiares durante un momento muy especial. Nunca llegamos a ser amigos, porque el vivía muy encerrado en su mundo y me daba no sé qué invadir su privacidad. Pero compartimos momentos hermosos y, como artista, él sabía muy bien quién era su público, aunque su música fuera considerada mersa, como decían mis amigas finolis.”

Estela Raval: “Fue alguien muy especial, que honraba la vida, el canto, el buen humor. Realmente no puedo creer su muerte. Lo he amado como un amigo y artista, por cómo lo quería la gente. No tenía que irse tan rápido, tenía mucho para dar y para vivir por toda la gente que lo ama y ha rogado día y noche por él. Es un golpe tremendo. Menos mal que queda su música: eso es lo que hace que los artistas se queden para siempre.”

Piero: “Es un momento de conmoción, pero así es la vida y pasan las cosas. Su muerte tendrá una repercusión muy fuerte en Latinoamérica y en todos lados. Uno ha conocido y palpado lo que significa. Incluso cuando estaba muy delicado de salud, era muy positivo, muy increíble, un maestro de la fe y un grande, también por ese lado.”

Chico Novarro: “Siento angustia y soledad luego de la muerte de un artista importante, pero por sobre todo un fenómeno, el valor más grande para un hombre que pasa su vida encima de un escenario. Fue una de las pocas figuras que trascendió en México y en el mundo entero. Una figura difícil de reemplazar.”

Mirtha Legrand: “Estoy muy mal, muy triste. Era un amigo y lo quería muchísimo. Se ha ido un ídolo popular, un personajón, un hombre ubicado, gracioso, sensacional. Estoy devastada, pero lo voy a recordar con una sonrisa.”

José Luis “El Puma” Rodríguez: “Sandro fue y es un hombre inigualable e irrepetible que marca una huella muy profunda en los corazones de todos nosotros. De verdad un grande, pero que no pudo aguantar más su cuerpo y debió despegar.”

Raúl Lavié: “Marcó una época. Fue un tipo al que debemos imitar y respetar por su forma de amar al público. En lo personal, fue un ser excepcional, un hombre que vivió para el arte, para vivir lo que es estar arriba de un escenario.”

Violeta Rivas: “Era una excelentísima persona, estamos muy tristes. Fue muy valiente porque soportó un montón de cosas. Pero el destino está marcado. Dios habrá dicho: ‘Basta de sufrir’.”

Graciela Borges: “Lo voy a recordar con amor, era un artista maravilloso, con una energía impresionante en el escenario. Era enorme.”

Jorge Coscia (secretario de Cultura de la Nación): Es una gran pérdida. Fue un ídolo indiscutido, un icono de la cultura nacional. Su música conmovió e hizo bailar a varias generaciones de argentinos y argentinas. La admiración que por décadas mereció del pueblo argentino, lo ubican en el privilegiado panteón de las referencias de nuestra cultura popular. Su capacidad de apropiarse y resignificar en clave local las influencias de la música universal, constituye su insoslayable aporte a nuestra identidad, y es quizás el mejor ejemplo que nos deja a los hombres y mujeres de la cultura.

Producción: Facundo García, Daniela Yaccar y Luis Paz.

Compartir: 

Twitter

 
EL PAíS
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.