La diputada Graciela Camaño se mostró esperanzada de que puedan confluir en el mismo espacio el ex presidente Eduardo Duhalde y el diputado Francisco de Narváez. “Parecería que estamos cada uno por nuestro lado, pero yo confío que en algún momento, cuando haya que decidir estratégicamente, más de uno vamos a estar juntos”, estimó la esposa de Luis Barrionuevo, con poco apego por la gramática.

“Yo estoy alineada con Eduardo Duhalde”, aclaró, de entrada, la dirigente. El ex presidente, hasta ahora, no logró perdonarle a De Narváez que excluyera a sus candidatos de las listas. Aunque en los últimos días dijo que “lo aprecia”, no cesa de burlarse de sus aspiraciones presidenciales: “Si se habilita a un extranjero, es muy posible que Rockefeller sea el próximo presidente argentino”.

Camaño, de todas formas, no pierde las esperanzas. Cuando la consultaron sobre la posibilidad de que Duhalde y De Narváez terminen reuniendo fuerzas en una misma lista, planteó: “Yo creo en cualquier tipo de convergencia. Vamos a tener con miras a 2011 muchas alianzas, posiciones, muchas maneras de encarar de la manera más conveniente las elecciones”. “La política es el arte de lo posible”, afirmó Camaño, utilizando una frase de la que gusta mucho el ex presidente Carlos Menem.

La diputada reclamó a los peronistas disidentes dejar de lado “posicionamientos personales para mejorar la calidad de la política” y sostuvo que el lanzamiento de las candidaturas presidenciales “tienen que tener un grado de cordura, habida cuenta de que hay una serie de cuestiones que están sin resolver para el común de la gente. Lo importante es ir perdiendo esta preocupación por lo personal”.