La discusión sobre la conformación de una comisión investigadora para analizar en la Cámara de Diputados todo el comercio exterior con Venezuela volvió a enfrentar a oficialistas y opositores en el Congreso. La iniciativa impulsada por la UCR quiere investigar “toda” la relación comercial bilateral con el gobierno de Hugo Chávez ante las denuncias de corrupción, y ya sumaron la adhesión de la Coalición Cívica, el PJ anti K y otros bloques opositores. “Es un tema que está en la Justicia y hay que dejar que actúe”, replicó el jefe de la bancada oficialista, Agustín Rossi, mientras el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, calificó esas denuncias como “una mentira” y “un invento”.

El proyecto del radical bonaerense Juan Tunessi todavía es un borrador, pero ya desató la puja entre oficialistas y opositores. Tunessi presentará ante su bloque la iniciativa, aunque el jefe de su bancada, Oscar Aguad, ya adelantó las negociaciones con el resto de los bloques opositores. “Existen antecedentes legislativos para que la Cámara de Diputados conforme una comisión investigadora”, dijo Tunessi a Página/12 para desestimar que la comisión no incorpore al Senado y abarque a todo el Congreso.

Tunessi propone en su “bosquejo” de proyecto de resolución la conformación de una comisión integrada por once diputados que investigue “toda la relación comercial con Venezuela, realizada en forma paralela a la Cancillería: donde se analicen la importación de fueloil, las denuncias sobre el pedido de coimas en la venta de maquinaria agrícola y el fideicomiso armado para toda relación comercial bilateral”. Su labor estaría pautada por 180 días, más otros 30 días hábiles para emitir un dictamen, cuyas conclusiones serían elevadas a la Justicia.

El oficialismo ya les salió al cruce a las pretensiones de la oposición. Rossi desestimó la iniciativa al señalar que armar una comisión investigadora tendría sentido “si algún dirigente opositor tuviera más información que la periodística”. Si no –continuó el jefe de los diputados K–, no le veo ningún sentido a que el Congreso se ponga a investigar algo que hasta ahora está en el marco del Poder Judicial”. “Hay que dejar que el Poder Judicial actúe”, insistió Rossi y sostuvo que no le parecía “conveniente” que se involucrara en la cuestión el Congreso.

Sin embargo, desde el radicalismo ya trabajan en la suma de adhesiones a la iniciativa. “No conocemos el texto, pero en principio compartimos el criterio de que el Congreso pueda investigar y establecer responsabilidades políticas. Además de control judicial, tiene que haber control parlamentario”, dijo a este diario Adrián Pérez, uno de los referentes de la Coalición Cívica en Diputados. “Hay una relación oscura ente Argentina y Venezuela. Los negocios entre los dos países se hacían paralelos a la Cancillería. Uberti era un embajador sin cartera”, señaló Pérez, que firmó una de las denuncias ante la Justicia.

El jefe del macrismo en la Cámara baja, Federico Pinedo, prefirió poner algo de distancia sobre el papel de la comisión investigadora. “No hay que arrogarse el papel de la Justicia. Corresponde investigar para saber si existen errores en la legislación para legislar en consecuencia y subsanarlos. Pero no puede ser el objetivo de la comisión reemplazar la tarea de la Justicia. Hay jueces que quieren ser legisladores y legisladores que quieres ser jueces. Tenemos que parar un poco con esto”, advirtió Pinedo ante Página/12.

Pero el peronismo anti K se sumó rápidamente a la iniciativa radical. Felipe Solá adhirió a la idea de conformar una comisión investigadora sobre la relación bilateral con Venezuela y comprometió el apoyo de su bloque. Mientras tanto, Solá prepara su propio proyecto –que presentará esta semana– para que el Congreso investigue el canje de la deuda externa en default que acaba de abrir el Gobierno con los holdouts.

En tanto, la mayoría de los bloques de centroizquierda todavía no se pronunció sobre el proyecto, cuyo texto afirmaron desconocer. Aunque los juecistas cordobeses ya habrían dado el visto bueno a la iniciativa de la UCR.

En el Gobierno tampoco estuvieron ajenos a la propuesta opositora. Aníbal Fernández fue el encargado de salir a desmentir las denuncias sobre coimas en la negociación de maquinarias agrícolas con Venezuela y comparó la situación con “los traders” (empresas intermediarias) que se pagan en Brasil: “Brasil también tiene sus traders, que se pagan en blanco. Pero lo primero que hay que hacer es investigar. Esto es un gran bluff, una mentira, un invento. Estos por politiquería hacen cualquier cosa”, retrucó el jefe de Gabinete.