La presidenta Cristina Fernández de Kirchner afirmó ayer que los argentinos vivimos “en un país distinto” al de 2003, destacó que el sector automotor triplicó la cantidad de trabajadores en ocho años y medio, y que “somos el país de América latina que fabrica y vende más autos para el mercado interno”. De visita en la planta que Toyota Argentina tiene en la ciudad bonaerense de Zárate, donde la compañía anunció la ampliación de la producción de camionetas, la mandataria ofreció un discurso casi en simultáneo con el de Hugo Moyano en Huracán y se refirió también a la identificación de los restos del ex senador Guillermo Vargas Aignasse en una fosa común de Tucumán. “Me impresionó que lo encontraran allí, un lugar que él (por Néstor Kirchner) visitó el 30 de septiembre de 2003 y donde depositó un ramo de flores que le alcanzó un familiar de un desaparecido”, relató.

“En estos ocho años y medio casi hemos triplicado la cantidad de trabajadores del sector automotor, que es altamente calificado y generador de mucho empleo”, dijo la Presidenta. Tras recorrer las instalaciones, Cristina plantó en el parque de la fábrica un ceibo junto a otro que en 2005 había colocado el ex presidente Kirchner. “Dicen que hay que plantar un árbol, tener un hijo y escribir un libro. El plantó el árbol, tuvo dos hijos y no escribió ningún libro, pero escribió una parte de la historia argentina”, enfatizó. “Porque quién en el 2003, con una mano en el corazón, imaginaba este país en todos sus aspectos: derechos humanos, trabajo, desarrollo”, se preguntó la Presidenta, para quien “cada fábrica argentina es como propia, como hija de este proyecto nacional, popular y democrático que generó más de cinco millones de puestos de trabajo”.

En materia automotriz, la jefa de Estado remarcó que “somos el país en toda América latina que fabrica y vende más autos para el mercado interno” y precisó que en el 2010 “se vendió un auto cero kilómetro cada 60 habitantes, con lo que Argentina se ubicó en el primer lugar de ventas”. “Me siento muy orgullosa de todo lo que hemos hecho, y más comprometida por lo que falta hacer”, dijo CFK tras mantener una videoconferencia con Berazategui, donde se entregaron viviendas y se inauguró un jardín de infantes, y con una fábrica de calzados y vestimenta de seguridad en la capital de Catamarca.

“Todavía tenemos que llegar a otros argentinos con programas sociales verdaderos, como la Asignación Universal por Hijo, no asistencialistas ni clientelares”, planteó la Presidenta, y llamó a todos los argentinos a “ejercitar entre todos la solidaridad para llegar a los que todavía faltan”. “Sueño con el día en que todas las asignaciones universales que hoy pagamos, que son más de tres millones y medio, se conviertan en asignaciones familiares, porque ese día habremos tenido un régimen de pleno empleo con el que sueña cualquier presidente bien nacido”, confió.

La mandataria contó que se comunicó por la mañana con el diputado provincial tucumano Gerónimo Vargas Aignasse, luego de conocer que los restos de su padre, el ex senador Guillermo Vargas Aignasse –desaparecido en 1976– fueron encontrados en una fosa común donde funcionó el centro clandestino Pozo de Vargas. “Me impresionó que lo encontraran allí, un lugar que él (por Kirchner) visitó el 30 de septiembre de 2003 y donde depositó un ramo de flores que le alcanzó un familiar de un desaparecido”, relató. La jefa de Estado contó que Vargas Aignasse le recordó una conversación que había mantenido con Kirchner en 2003, donde el ex mandatario le aseguró que quienes habían cometido delitos de lesa humanidad iban a ser juzgados. “Me dijo que lo vivió en ese momento como una suerte de acompañamiento personal pero que le sonó como decirle que iba a ir a la Luna”, remarcó. En ese marco, Cristina recordó un “maravilloso artículo que escribió una arqueóloga del Equipo de Antropología Forense en Página/12, que lo tituló ‘Un país distinto’” y cerró su discurso diciendo que Kirchner “no escribió un libro, pero contribuyó a hacer un país distinto”.