La presidenta Cristina Fernández de Kirchner decidió postergar ayer su viaje a Santa Cruz, donde tiene previsto pasar Año Nuevo con sus hijos Florencia y Máximo, su nuera Rocío y otros familiares. La mandataria se quedó en Buenos Aires y mantuvo encuentros de trabajo con el vicepresidente Amado Boudou y con varios ministros y secretarios de Estado.

El viaje de la Presidenta a Santa Cruz quedó finalmente para hoy. Tras pasar allí el fin de semana y recibir el 2012, CFK regresará el lunes a Buenos Aires. Dos días después, el miércoles, está programada la operación a la que será sometida en el Hospital Universitario Austral de Pilar, en la cual le extirparán un tumor de la glándula tiroides.

Tras suspender su vuelo a Santa Cruz, Cristina Fernández se reunió en dos oportunidades con el vicepresidente Amado Boudou para coordinar los temas a desarrollar durante los veinte días que estará de licencia para recuperarse de la intervención quirúrgica y en los cuales el ex ministro de Economía quedará a cargo del Poder Ejecutivo.

Los encuentros con Boudou se desarrollaron en la Quinta de Olivos, donde la Presidenta permaneció durante toda la jornada. Allí recibió además a los ministros de Defensa, Arturo Puricelli; y de Planificación, Julio De Vido. También mantuvo reuniones de trabajo con los secretarios de Obras Públicas, José López; y de Transporte, Juan Pablo Schiavi; y con el secretario general de la Presidencia, Oscar Parrilli.

Por otra parte, Pedro Saco –el cirujano que estará a cargo de la operación a Cristina Kirchner– habló por primera vez con los medios sobre la intervención quirúrgica pautada para el próximo miércoles. Dijo que considera “un honor poder atenderla”, pero aclaró que la operación a CFK “será con el profesionalismo de todos los casos”, ya que se trata “de un procedimiento normal”.

Saco contó, además, que mantuvo un encuentro con la Presidenta, pero no quiso dar detalles sobre por qué fue el elegido para realizar la operación. “Eso lo pueden hablar con el director del hospital”, señaló al respecto. El médico, que está a cargo del Area de Cirugía Oncológica en el Hospital Universitario Austral, fue muy cuidadoso y más bien parco en sus declaraciones, en las que se limitó a señalar que atender a la Presidenta “será un privilegio”.