El sindicalismo que se ubica en la vereda opuesta a Hugo Moyano volvió a realizar ayer un plenario de secretarios generales para fijar el cronograma de la normalización de la nueva CGT, de donde surgieron duros cuestionamientos al camionero. “El compañero (Hugo) Moyano últimamente ha tenido una posición de confrontar y no ha tenido en cuenta quién se sienta a comer en sus cenas. Porque en esas mesas existen muchos enemigos de los trabajadores. Y cada foto que se saca es un hecho político”, afirmó el dirigente del gremio de Sanidad, Héctor Daer, que ofició como vocero del encuentro, y que le puso “nombre y apellido” a los enemigos del movimiento obrero que comparten comidas con el camionero: “La Sociedad Rural”.

“CGT hay una sola y quizá surja un grupo disidente”, señaló Daer para despejar dudas sobre quien ostenta la mayoría de los gremios dentro de la central sindical, otorgándole al moyanismo el mote de “disidente”. El encuentro de ayer en la sede porteña del Smata reunió –según Daer– “82 secretarios generales de organizaciones nacionales, un gran número de organizaciones fraternales no federadas y organizaciones de primer grado”. La reunión estuvo presidida por el metalúrgico Juan Belén, como secretario adjunto de la CGT, con mandato prorrogado, y confirmó para el 5 de septiembre el Confederal cegetista y el 3 de octubre para el congreso que elegirá a las nuevas autoridades de la central.

El dirigente de Sanidad intentó no abandonar la propuesta de unificar a todo el movimiento obrero en una sola central, pero tampoco dudó en cargar contra el camionero. “Vemos hoy que hay mesas o alianzas políticas con aquellos que esmerilaron los derechos de los trabajadores con el único objetivo de obtener mayores ganancias y enriquecerse, sin que les importe la distribución social equitativa”, lanzó Daer para referirse al nuevo marco de alianzas de Moyano, a quien responsabilizó de que “con el único objetivo de competir políticamente, esmerila” al movimiento obrero.

Aunque a la hora de dar precisiones sobre los comensales con los que Moyano comparte almuerzos y cenas, Daer le puso “nombre y apellido” a la “Sociedad Rural”. Pero evitó referirse al encuentro gastronómico del camionero con Eduardo Duhalde, aunque mencionó que “cada foto que se saca es un hecho político” que no están dispuestos a compartir. “La agenda es de la CGT, que no sé por qué hace ocho meses no se gestionaban y ahora aparecen casi como la toma de la Bastilla”, sentenció Daer sobre la conducción moyanista cuando los consultaron por la similitud con los reclamos que plantea el camionero. Un temario que incluye la suba del mínimo no imponible del impuesto a las Ganancias, la universalización del salario familiar, el reparto de fondos a las obras sociales y el aumento del salario mínimo, vital y móvil.

Sin embargo, Daer sostuvo que el plenario analizó los pasos legales y administrativos para formalizar la nueva conducción cegetista, pero que no discutió candidaturas. Por ahora, independientes, Gordos y ex moyanistas comparten la candidatura del metalúrgico Antonio Caló para la secretaría general, aunque las divergencias surgen en los espacios que cada uno de esos sectores aspira a ocupar en la nueva estructura sindical que aglutinará a los gremios industriales y de servicios más numerosos. El congreso que formalizará la nueva conducción será el 3 de octubre.