En un decidido tono opositor, el líder cegetista Hugo Moyano cerró el acto de la Juventud Sindical (JS) en el Luna Park. “No tenemos vocación de esclavos, si nos ponen como enemigos es una decisión de ellos”, agitó el camionero a los jóvenes que inundaron el antiguo estadio de boxeo. Con un lleno los seguidores de Facundo Moyano presentaron la nueva JS que refleja la conducción de la CGT que lidera su padre. “Y ya lo ve y ya lo ve es una sola CGT”, gritaban sin parar los militantes de los gremios que asistieron al acto, profundizando la interna sindical en la que está embarcada la central obrera.

“Ahora se habla de armonizar las normas. Es un ajuste más que piensan hacer no en las provincias, sino en todo el país”, acusó Moyano en su discurso levantando al público que lo escuchaba atentamente. Enfundado en una camisa rosa, el camionero fue el único que desentonó en el escenario con las remeras negras que portaban los integrantes de la JS con la figura del delegado metalúrgico desaparecido hace cincuenta años por las fuerzas de seguridad, Felipe Vallese. La cúpula de la central moyanista, que fue electa el 12 de julio en el congreso que se realizó en Ferro, pero que fue anulada por el Ministerio de Trabajo, se encontraba en pleno entre los invitados en las primeras filas. “La pelea es en el 2013”, anticipó, poniendo el ojo en las elecciones legislativas del año que viene.

Dos años atrás la JS se presentó oficialmente en el mismo lugar, pero en un marco político completamente distinto. La presencia del ex presidente Néstor Kirchner junto a parte del gabinete nacional de entonces y el apoyo de los gremios cegetistas al proceso iniciado en 2003 eran los puntos más claros de la propuesta. Las loas al proyecto nacional emanaban de las bocas de los dos Moyano así como el llamado a la participación de los jóvenes en el proceso político. Hoy los símbolos del kirchnerismo fueron casi sepultados por los organizadores del acto y primaron más las críticas al modelo y el apuntalamiento de los ejes que viene desplegando Moyano.

“Hoy los jóvenes tienen que aprender que hay que luchar y sacrificarse desde sus puestos de trabajo y no desde las dádivas que les pueda dar el Estado”, señaló Moyano padre, apuntando a la agrupación La Cámpora sin nombrarla. “Hemos constituido esta CGT en momentos difíciles, fundamentalmente en contra del poder político que hizo todo lo posible para que el congreso del 12 de julio no se hiciera”, señaló el camionero una vez más, reiterando su denuncia contra el Gobierno de haber interferido en la elección interna de la CGT. “En los ’90 nos opusimos a la privatización de la Anses y ahora que se reestatizó resulta que disponen del dinero de los jubilados”, continuó el líder sindical con su ataque al gobierno del que fue aliado durante ocho años y recordó un pequeño incidente con la presidenta Cristina Kirchner. “Esto le cayó muy mal a la señora Presidenta: es importantísimo que el día de mañana pueda conducir los destinos del país un trabajador”, apuntando al acto de 2010 en la cancha de River en conmemoración del 17 de Octubre en el que la Presidenta debió aclararle que había comenzado a trabajar a los 16 años.

El acto comenzó cuando se apagaron las luces y un grupo musicalizaba los videos que se iban sucediendo en las pantallas. La figura y la historia de Vallese se mostró con una historieta animada que finalizó con personas colgadas del techo bajando con bombos iluminados al ritmo de Los Redonditos de Ricota. Las banderas y las flameadoras mostraban la procedencia de cada grupo: los lecheros de Atilra se sacudían al ritmo de una batucada que sonaba en las tribunas, mientras que los petroleros, los trabajadores de peajes y los camioneros mostraban su caudal de movilización. Unos cuantos trabajadores se despojaron de sus camisas por el calor humano y el ambiente veraniego que sorprendió a los porteños. En las primeras filas de invitados se encontraba el adjunto de Camioneros, Pablo Moyano, y entre los asientos sobresalió también el dirigente del gremio de los trabajadores del subte Néstor Segovia.

“Que lo vengan a ver, que lo vengan a ver, la conduce Moyano, es una sola la CGT”, cantaban en el estadio. Facundo Moyano también se había mostrado duro frente al gobierno nacional en su discurso. “Venimos escuchando discursos antisindicales y cuasigorilas. Si fueran empresarios no sería el problema, pero emanan de las usinas oficiales”, señaló el diputado por el Frente para la Victoria y líder de la JS. “Sabemos que con nosotros no alcanza, pero hay otros que creen que sin nosotros se puede”, sostuvo Moyano hijo en su intervención con cierto dejo de resignación por el apartamiento de las filas del Gobierno que su sector sindical viene trazando.