La posible re-reelección presidencial de Cristina Kirchner volvió a unificar a toda la oposición, aunque los planteos se hicieron en tres encuentros separados, con cada sector buscando sus propios reagrupamientos electorales. El FAP, con Hermes Binner a la cabeza –pero con ausencia notable de algunos aliados–, lanzó la campaña de recolección de un millón de firmas en dos meses bajo el lema “cumplamos la Constitución” y “no a la re-reelección”. Más tarde, el PRO no quiso quedar rezagado y junto al puñado de dirigentes aliados presentaron en un hotel de Congreso –con presencia radical– la convocatoria a una “gran asamblea ciudadana” para el 10 de diciembre bajo la consigna macrista “la re-república contra la re-reelección”. Por su parte, la cúpula de la UCR se reunió con el camionero Hugo Moyano, en donde la mayor coincidencia fue también la oposición a un nuevo mandato de Cristina Kirchner, una propuesta hasta ahora jamás avalada por la Casa Rosada (ver aparte).

La reacción opositora contra la re-re de Cristina fue motivo de encuentro en la sede porteña del Cemupro, la fundación que dirige el ex candidato presidencial Hermes Binner, donde el FAP presentó en sociedad su propia campaña de recolección de “un millón de firmas” en apenas dos meses (hasta el 30 de octubre, “aniversario de la primera elección de la recuperación democrática”) para “frenar” cualquier intento de reforma constitucional. “Los tres puntos que son la base de nuestra demanda son el respeto a la independencia de poderes, el respeto del federalismo y de los derechos sociales”, arrancó un escueto Binner.

Después del socialista, Margarita Stolbizer leyó una carta de adhesión del obispo emérito de Misiones Joaquín Piña, quien encabezó el rechazo a la re-reelección del gobernador Carlos Rovira en su provincia. “La propuesta es activar mecanismos de participación popular para ponerles freno a los atropellos”, insistió la líder del GEN. Humberto Tumini, de Libres del Sur, se encargó de marcar las diferencias con “otros sectores políticos que coinciden con el mismo objetivo, pero con los que tenemos diferencias políticas y del país que queremos”. Una forma de tomar distancia de radicales y macristas. “Nos oponemos a cualquier reforma de la Constitución, aun si ni siquiera se menciona la re-reelección”, sumó el senador cordobés Luis Juez.

Los dirigentes del FAP firmaron el petitorio, que no suscribió la Unidad Popular. Los referentes de la alianza intentaron justificar las ausencias de Víctor De Gennaro y Claudio Lozano por “cuestiones personales”, aunque tampoco estuvo ninguno de los otros tres diputados de esa fuerza. Sí, en cambio, participó la senadora de la Coalición Cívica, María Eugenia Estenssoro. “Comparto la iniciativa”, dijo Estenssoro a Página/12 para explicar su “adhesión personal” a la campaña. Con todo, deslizó que la agrupación que fundó Elisa Carrió podría llegar a un acuerdo electoral con el FAP. “Ya hemos compartido propuestas programáticas y elecciones con el socialismo en 2007 y 2009”, señaló.

Advertidos de las otras iniciativas opositoras, el PRO y sus aliados no quisieron quedar rezagados. El Grupo de Acción Política por la Unidad (GAPU) convocó de urgencia para ayer por la tarde a un encuentro en un hotel de Congreso bajo la consigna macrista de “la re-república contra la re-reelección”. La diputada del monobloque Unión por Todos Patricia Bullrich fue la encargada de dar la bienvenida a los presentes. Fueron de la partida los diputados macristas Federico Pinedo, Paula Bertol y Pablo Tonelli, además del jefe del PRO, Humberto Schiavoni; representantes del Peronismo Federal como Eduardo Mondino, de los demócratas mendocinos y de distintas ONG; además de una nutrida presencia radical: el diputado Oscar Aguad, la porteña Silvana Giúdici, el constitucionalista Jorge Vanossi y el ex ministro de Educación de la Alianza Andrés Delich. “Un peronista corregible”, dijo Bullrich para señalar la llegada de Gerónimo “Momo” Venegas, el jefe de los peones rurales que hizo un breve paso por el encuentro después de participar junto a Moyano de la reunión con la UCR. Politólogos y juristas fueron los encargados de abrir el debate “con ideas disparadoras”, dijeron, en contra de la necesidad de una reforma constitucional y la posible re-reelección presidencial. Expusieron Roberto Gargarella, Martín Bohmer y el propio Vanossi. “Nos invitaron”, sostuvo Aguad ante la consulta de este diario sobre la importante presencia radical en la iniciativa del PRO y sus aliados. Aunque enseguida el diputado cordobés reconoció su cercanía a las ideas que expresa el jefe de Gobierno porteño Mauricio Macri. “Es posible que más adelante nos incorporemos. Siempre estuvimos a favor de los acuerdos y éste es un lugar para discutir y acordar”, señaló Aguad.

Schiavoni confirmó que la idea es confluir el 10 de diciembre en una “gran asamblea ciudadana”, aunque admitió que las características de la convocatoria, que imaginan masiva, “aún no están definidas”.

Aunque hubo radicales en esa reunión, la conducción de la UCR no estuvo allí. Más temprano, se había encontrado con la CGT disidente de Hugo Moyano. Tocaron otros temas, pero la principal coincidencia, también, fue el rechazo a la reforma constitucional.