“Los enfrentamientos coyunturales no son una enemistad para siempre.” Con esa frase, el líder de la CGT opositora, Hugo Moyano, explicó ayer su reunión con la cúpula de la UCR, que le pidió apoyar su rechazo a la re–reelección y le ofrendó a cambio trabajar para juntar firmas a favor de la universalización de la asignación familiar y la eliminación del mínimo no imponible del Impuesto a las Ganancias. “La UCR ha sido invitada por la CGT, a través de Moyano, a sumarse a la campaña de recolección de firmas para la eliminación de los topes a las asignaciones familiares”, señaló ayer el titular del Comité Nacional, Mario Barletta, flanqueado por dirigentes como Gerardo Morales, Ricardo Alfonsín, Ricardo Gil Lavedra y Mario Negri, entre otros. Del otro lado de la mesa estaban Moyano, Julio Piumato, Gerónimo “Momo” Venegas y otros sindicalistas. En un día de intensa actividad política, Moyano reveló que también se comunicó con el gobernador de Córdoba, José Manuel de la Sota, para apoyarlo en su enfrentamiento con la Casa Rosada.

Tomaron café y agua con y sin gas. Se sentaron enfrentados en una larga mesa de la Federación Nacional de Camioneros. Atrás parecen haber quedado las acusaciones de Morales sobre “el sindicalismo rancio, de derecha” encabezado por Moyano, las críticas por la supuesta “dependencia del PJ” que le supo lanzar Alfonsín o la calificación de “monstruo creado por el Gobierno” de Ernesto Sanz. Esas palabras fueron previas al alejamiento del moyanismo del gobierno nacional.

“Hubo muy buena onda, un clima muy distendido”, relató uno de los participantes del encuentro. El líder camionero lo confirmó al salir: “La reunión fue muy buena”. Pero para disipar alguna duda, Moyano aclaró que detrás no hay intereses electorales: “No formamos un polo opositor ni nada que se le parezca, pero esto que estamos haciendo significa fundamentalmente la construcción de un país en libertad y eso es, sin dudas, lo que la mayoría de la sociedad está reclamando”, ratificó Moyano.

El encuentro giró en torno de los respectivos reclamos. “Acordamos no respaldar ninguna reforma de la Constitución Nacional por el peligro que significa la posibilidad de una re-reelección”, señaló Barletta. A cambio, el titular de la UCR manifestó su apoyo a los planteos de Moyano en contra el Impuesto a las Ganancias que afrontan los trabajadores: “No puede ser que se siga castigando el salario del trabajador cuando esto podría claramente ser reemplazado por el impuesto a la renta financiera. Esto ya no tiene explicación alguna”.

La reunión de la UCR se produjo en el marco de una serie de visitas que viene realizando el radicalismo a distintos actores políticos y sociales, en los que peregrina en contra de la reforma constitucional. Sin embargo, la reunión que tenía prevista con el presidente de la Conferencia Episcopal, José María Arancedo, fue suspendida hasta nuevo aviso.