Pino Solanas y Elisa Carrió, enfrentados por el acuerdo con el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri.
Imagen: Sandra Cartasso.

Las peleas en el Frente Amplio Unen no se detienen. Los protagonistas del escándalo en el acto del lunes siguieron con sus discusiones en público. El titular de Proyecto Sur, Fernando “Pino” Solanas, sostuvo que los dichos de la líder de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, son “un disparate” y advirtió que la dirigente “está muy mal, muy angustiada”. Les respondía a las duras declaraciones que la diputada le dedicó en televisión: “Me sentí muy usada por alguien que me fue a buscar para ser senador y al otro día me pegó como un macho cruel”, había asegurado la chaqueña, en referencia al discurso en el que Solanas descartó un acuerdo del FA-Unen con “la derecha moderna”. El líder del Partido Socialista y precandidato de la alianza, Hermes Binner, también se sumó a la contienda y afirmó que Carrió “se equivocó” al hacerle el desplante a Solanas. Además descartó una alianza con el PRO, igual que el referente de Libres del Sur, Humberto Tumini.

Lo que hasta ahora se manifestaba como diferencias de estrategia política empezó a tomar otro matiz entre los integrantes del FA-Unen. La diputada de la Coalición Cívica expuso en televisión detalles personales de su relación con Solanas, que hasta el año pasado era algo así como su amor platónico. Carrió sostuvo que el líder de Proyecto Sur fue a pedirle que lo ayude a ingresar al Senado y que ella les pidió a muchos votantes “conservadores” que los acompañaran con su voto para lograr que la ciudad de Buenos Aires tenga los tres senadores opositores. En ese contexto, reveló que se siente “despreciada” dentro del espacio. “Que me traten de gorda, chancha, loca. Me siento cansada y la educación no me da para decir algunas cosas, pero a todos les digo basta porque soy una mujer y estoy sola”, se quejó la referente de la CC, que igual que el papa Francisco pidió que recen por ella. “Recen para que no me lastimen tanto. No soy culpable de que una parte del pueblo me quiera. Yo amo a la gente, pero no me vivan pegando”, exclamó Carrió en el estudio de televisión y concluyó angustiada por lo que pasó durante el acto: “Yo entré a ese escenario y cada discurso era contra mí aunque no me nombraran; pero si yo llevé a la victoria a Unen en la Capital, ¿por qué me pegan tanto?”, se preguntó.

Solanas salió ayer por la tarde a responderle, luego de presentar un proyecto de ley de Pesca en el Senado nacional. “Lo que dijo es un disparate”, arrancó el cineasta, que negó haberle pedido ayuda para ingresar a la Cámara alta. Advirtió que “los votos no son de nadie” y recordó que antes de ganar las elecciones de 2013 en las legislativas de 2009 Proyecto Sur había salido segundo detrás del PRO. “Creer que la conducción de los partidos tiene atados a los ciudadanos, como a una vaquita en el fondo de la casa, es un disparate”, remarcó Solanas, quien consideró que sus votos fueron más “de la masa independiente” que del macrismo. Si bien vaticinó que el desacuerdo con Carrió “tiene vuelta atrás”, dijo que la diputada “está muy mal, muy angustiada, parece que estuvo pidiendo que la ayuden y que hay que rezar por ella”. “No sólo es una falacia, sino que también incurre en una enorme desconsideración personal hacia Pino, para colmo adornada con comparaciones de muy mal gusto sobre situaciones de violencia de género”, afirmó el legislador Javier Gentilini en defensa de su jefe.

Fiel a su estilo, Binner trató de calmar los ánimos. Consideró que Lilita se equivocó pero intentó dejar atrás las diferencias. “Eso ya es pasado (y) no quita toda la historia que tiene Carrió, su valentía para denunciar, de plantear que es necesario trabajar en un ambiente para una república que funcione, donde la Justicia debe jugar un rol fundamental como institución independiente.” Sin embargo, el socialista fue contundente en su negativa a hacer un acuerdo con Macri como quiere la chaqueña. “Nosotros pensamos diferente, no dejaríamos abandonados los hospitales o las escuelas como están hoy”, afirmó.

Tumini, de Libres del Sur, consideró que Carrió actuó igual que la Presidenta. “Evidentemente para ella, como para Cristina Fernández, no hay mejor defensa que un buen ataque. En lugar de victimizarse debería reconocer que el individualismo y las actitudes intolerantes hacia el pensamiento de los demás no aportan a una construcción colectiva como Unen”, disparó el dirigente, que incluso dijo que el futuro de Lilita dentro del espacio “dependerá de ella”.