EL PAíS
Las excusas de Servini
La jueza María Servini de Cubría volvió a rechazar la causa sobre los crímenes cometidos en jurisdicción del Primer Cuerpo del Ejército, a pesar de que la Cámara Federal no aceptó la excusación que presentó la semana pasada. Esta vez invocó la estrecha relación que su marido, un brigadier retirado, tiene con varios acusados.
“No puedo dejar de considerar que se me ordena investigar a las personas con que directa o indirectamente mi marido y yo hemos convivido por más de cuarenta años, lo que indiscutiblemente me crea el ambiente propicio para la pérdida de la serenidad”, escribió Servini para evitar hacerse cargo de esta megacausa en la que el fiscal Eduardo Freiler pidió la detención de 38 represores que actuaron en 19 centros clandestinos, y que fue reabierta hace dos semanas por la Cámara Federal tras la anulación de las leyes de impunidad. Servini había rechazado investigar la causa ESMA, también reabierta por la Cámara, porque uno de los imputados fue empleado suyo y por eso la derivó al juez Sergio Torres, quien en compensación le envió este expediente. Pero Servini entendió que era mucho más compleja y la rechazó.