El plenario de la comisiones de Presupuesto, de Finanzas y de Poderes, Peticiones y Reglamentos arrancará hoy el debate en Diputados del proyecto del Gobierno de pago soberano de la deuda externa que ya tiene media sanción del Senado. Tras las exposición del ministro de Economía, Axel Kicillof; el secretario Legal y Técnico de la Presidencia, Carlos Zannini, y la procuradora general del Tesoro, Angelina Abbona, el oficialismo emitirá el dictamen de mayoría para llevar la iniciativa al recinto de sesiones mañana mismo, donde buscará convertirla en ley con el único apoyo de sus aliados más fieles. Las principales bancadas opositoras –UCR, FR, PRO y FAP– mantienen su postura de rechazo al proyecto e insistirán en sus diferentes propuestas en minoría, mientras que un puñado de bloques menos numerosos optarán por la abstención.

Igual que ante los senadores, Kicillof, Zannini y Abbona serán los funcionarios encargados de defender el proyecto oficial que cambia la ruta de pago a los bonistas reestructurados que acepten un nuevo canje de los títulos bajo jurisdicción argentina y propone crear una cuenta de Nación Fideicomiso para depositar los pagos que le hubieran correspondido –“como muestra de voluntad y capacidad de pago”– al 7 por ciento de los bonistas que no ingresaron a los canjes de 2005 y 2010.

El oficialismo, además, ya agregó, en Diputados, al texto original del proyecto algunas propuestas opositoras, como la de incorporar la jurisdicción francesa como opción para los bonistas que acepten modificar la ruta de pago que no incluya la legislación de los Estados Unidos, donde el fallo del juez neoyorquino Thomas Griesa a favor de los fondos buitre frenó el pago de un vencimiento que la Argentina había depositado en el agente fiduciaro Bank of New York Mellon. También propuso crear una comisión bicameral para investigar la deuda externa argentina desde el comienzo de la última dictadura militar, el 24 de marzo de 1976.

El kirchnerismo considera que ya no hay lugar para otras modificaciones que las que incorporó el Senado y quiere que el proyecto se convierta en ley rápidamente. Apuestan a que la norma esté lista antes de fin de mes: el próximo vencimiento de pago a los bonistas. La ley también será el instrumento legal que la presidenta Cristina Fernández de Kirchner exhibirá ante la Asamblea General de la ONU, el 24 de septiembre, como muestra de voluntad de pago de la deuda externa argentina en medio de la disputa legal que el Estado mantiene con los fondos buitre.

Por eso, buscará hoy emitir el dictamen de mayoría para debatirlo en el recinto mañana mismo, en una sesión especial ya convocada para ese fin. Decepcionados porque las modificaciones aceptadas no lograron sumar la adhesión de ninguna bancada opositora, desde el bloque del Frente para la Victoria trabajaron en garantizar la presencia de su propia tropa y la de sus aliados más firmes, un total de 133 o 134 diputados, que le permite alcanzar el quórum propio para sesionar y la mayoría de la Cámara baja para convertir el proyecto en ley.

El grueso de la oposición insistirá en el rechazo, aunque expondrá sus propias iniciativas. El massista Frente Renovador ya había presentado en sociedad “una propuesta integral” sobre la que tampoco acepta modificaciones: allí propone un canje “provisorio” de jurisdicción para los bonistas reestructurados con un variado menú de distintas plazas financieras de Europa. La UCR, en tanto, presentó contrarreloj su propio proyecto sobre la creación de una bicameral investigadora de la deuda para no quedar sin propuesta propia ante la negativa de no acompañar al oficialismo. Mientras que la diputada Alcira Argumedo, de Proyecto Sur, adelantó que seguirá los pasos de Fernando “Pino” Solanas en el Senado y se abstendrá en la votación.